Pese al rotundo rechazo del Parlamento inglés a la propuesta de acuerdo que Theresa May había negociado con Bruselas, la libra se ha seguido apreciando esta última semana, bien es verdad que ligerísimamente, frente al dólar, y cerró el viernes a 1,2912 dólares por cada libra. La libra parece así apostar por un Brexit acordado, pero lamentablemente no nos ha dado la oportunidad de comprarla a los niveles cercanos a 1,20 que proponíamos en nuestro comentario anterior. Seguiremos esperando esa oportunidad.
También las acciones de Goldman Sachs, nuestro valor de hace dos semanas, han seguido subiendo, dentro del espectacular “rally” de las Bolsas americanas, y cerraron el viernes en 203 dólares por acción.
Una de las acciones que también ha vivido eso, a su manera, ha sido Netflix, la disruptiva plataforma de contenidos audiovisuales que ha cambiado por completo nuestra forma de disfrutar películas y series, que el martes se disparó al anunciar una subida de sus precios, pero que se vino abajo el viernes tras la presentación de los resultados del cuarto trimestre.
El lunes, ya cerrada la sesión, Netflix anunció una subida de los precios de sus suscripciones, propiciando una fuerte subida de la acción en el llamado mercado “after hours”, subida que se prolongó en la sesión del martes. Sin embargo, las cifras del cuarto trimestre decepcionaron, esencialmente porque los beneficios se redujeron un 28% respecto a los del tercer trimestre. La evolución del número de suscriptores fue buena, con un 26% de crecimiento, y la plataforma dice contabilizar ya el 10% del tiempo visionado de televisión en Estados Unidos. Pese a todo ello las acciones cayeron un 4% en la sesión cerrando a 339,1 dólares por acción y comiéndose así una buena parte de lo ganado en la sesión del martes, tal y como se ve en el Gráfico.
No es la primera vez que a Netflix le pasa algo similar. En nuestro Gráfico semanal del 22 de octubre de 2018 veíamos cómo Netflix había subido “after hours” un 15% el 17 de octubre para luego volver al nivel original los días siguientes. Asimismo, en nuestro Gráfico semanal del 23 de julio de 2018 veíamos cómo Netflix, que hasta fin de junio no había parado de subir, cayó con fuerza tras presentar sus resultados en julio, ya que la evolución de las suscripciones decepcionó a los inversores.
Netflix ha sido, junto con Facebook, pero un poco antes, el primero de los FAANG (Facebook, Amazon, Apple, Netflix, Google) que empezó a bajar, precisamente en julio, anticipándose a lo que luego fueron las fuertes caídas de Apple o Amazon.
Nos parece prudente esperar a niveles entre 250 y 300 dólares por acción para iniciar las compras de Netflix, que cotiza todavía, incluso después de la fuerte caída que acumula desde julio, a unos multiplicadores por encima de las cien veces beneficios.
