Tras la decepción de ayer del Banco Central Europeo, la economía estadounidense se ha mantenido hoy dentro del guion establecido con un dato de empleo del mes de noviembre en línea con lo esperado, y la consiguiente expectativa de que la Reserva Federal inicie el proceso de normalización de sus tipos de interés en su próxima reunión del 15 y 16 de diciembre. El mercado norteamericano de renta variable ha celebrado con ganancias la ausencia de sorpresas mientras que el europeo ha seguido digiriendo hoy el fiasco del BCE, aunque de forma bastante ordenada.
Con relación a los datos de empleo publicados en Estados Unidos, y aparte de lo ya comentado, es conveniente ser conscientes de las divergencias que se están produciendo en el seno de la economía estadounidense entre el ritmo de actividad del sector servicios (claramente expansivo) y la debilidad que muestra el sector industrial (en dinámica contractiva en estos momentos). De mantenerse, esta divergencia requerirá de una atención especial a los efectos del diseño de la estrategia de inversión en renta variable estadounidense de cara a los próximos meses. El dinamismo del sector servicios, con un peso en la economía estadounidense del orden del 85%, garantiza cifras decentes de crecimiento del PIB norteamericano de cara a los próximos trimestres. En cambio, la debilidad del sector industrial, con un peso de alrededor de dos tercios de la capitalización bursátil, puede suponer un lastre importante para las perspectivas de revaloración de la bolsa estadounidense. Como decíamos, si esta divergencia se mantiene, sería aconsejable el ir sesgando las posiciones en renta variable estadounidense hacia compañías de mediana y pequeña capitalización (mucho más sensibles al ciclo doméstico) en detrimento de las grandes multinacionales norteamericanas (mucho más expuestas al ciclo global).
El otro punto de interés durante la jornada de hoy fue la cumbre ordinaria de la OPEP celebrada en Viena y que, como se esperaba, finalizó sin acuerdo para reducir los niveles de producción del cártel, arrastrando así al precio del crudo a la baja hacia la zona de soporte situada en el entorno de los 40 USD/barril para el West Texas Intermediate.
Terminamos por tanto esta primera semana de diciembre digiriendo la decepción por las medidas anunciadas ayer por el BCE, y con la expectativa de que la Reserva Federal se atenga en cambio al guion marcado y suba sus tipos de interés en su próxima reunión del 15 y 16, por primera vez en diez años.