Raul74
28/01/16 23:00
Ha comentado en el artículo ¿De dónde vienen Los Niños?
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Estoy de acuerdo.
El mar es el principal reservorio y regulador del clima. La atmósfera terrestre la podríamos denominar como el “debil aliento” del mar. Aunque quizas obvias el tema volcanico, más del 80 por ciento de las calorías del Sol que no llegan a la Tierra por el aumento del albedo tras las erupciones volcánicas o los impactos de meteoritos, se acumulan en el mar que regula pero prolonga dichos efectos. Erupciones como la del Pinatubo, cuyos efectos sobre la superficie no se prolongaron por mas de tres años, la temperatura del mar ha descendido durante más de diez años, lo que se tradujo en una moderación del aumento de las temperaturas o incluso en una moderada recesión del calor de la atmósfera de la Tierra.
Debido a la corriente de “el niño”, o tambien debido a erupciones importantes de algún volcán en la zona, los cambios térmicos más importantes, no ocasionados por las espaciadas catástrofes de meteoritos, se producen generalmente desde el Pacífico, ya que las corrientes siempre se desplazan por la superficie del mar, desde las zonas más calidas a las mas frías y el lugar de nuestro planeta donde se alcanza más acumulación de calorías es en el ecuador del Pacífico, además es donde se localiza el área con mayor energía orogénica del planeta, causante de mas del 90 por ciento de erupciones y de actividad sísmica y el área del arco de Insulindia es la más activa de la zona.
Por tanto, las corrientes que nacen en el ecuador del Pacífico transportan buena parte del calor acumulado hacia los otros océanos de la Tierra, de ahí que las erupciones volcánicas de la zona tengan mucha más influencia por su dispersión climática global que otras que tienen lugar en áreas más próximas a los polos o en zonas con menor masa de agua.
Cuando una erupción reduce el flujo de radiación del Sol sobre el Pacífico inhibe el tradicional aporte de calorías al resto de los mares y a la atmósfera global.
La masa fluida de la superficie terrestre, la que es susceptible de entrar principalmente en la termodinámica del clima, está compuesta en más del 99 por ciento por el agua del mar, mientras que bastante menos del uno por ciento restante lo componen las moléculas de los gases que integran nuestra atmósfera. Por otra parte, más del 80 por ciento de las calorías que diariamente nos envía el Sol inciden sobre la superficie marina de nuestro planeta. El volumen de calorías que acumula la atmósfera con relación al mar es casi insignificante. El balance del intercambio de calorías entre el océano y la atmósfera, que determina la dinámica del clima, es extremadamente favorable al mar.