Buenas y bienvenido. No frecuento este foro (que por cierto veo que está animadísimo). Suelo serguir sólo el foro de Bolsa.
Yo creo que la respuesta de todas tus preguntas es "sí".
Las cosas no suelen ser blancas o negras. Generalizar, etiquetar, meter a todos en el mismo saco, etc. suele llevar a errores, confusiones, discusiones y conflictos, más graves cuanto más ignorantes son los que se enfrentan.
Tendemos a reducirlo todo a titulares: "PP de derechas", "VOX fascista", "Podemos bolivariano", "CiU los del 3%", "PSOE los de la cal viva", etc.
Simplificarlo lo hace más fácil de entender, pero lo aleja de la realidad. Y además desprestigia al adversario político, y por tanto se usa con tanta frecuencia. Al final, esas etiquetas permean y se calan en las personas de a pie.
Te pondré un ejemplo. Yo de jovencito pensaba que ser de derechas era responder a tus preguntas con un "no", y que lo "correcto" era ser de izquierdas, republicano, ecologista, ateo, pacifista, del Barça y no exaltar la españolidad (soy de Barcelona).
¿Por qué pensaba eso? No estoy seguro. Contagio social, supongo. Cuando fui madurando entendí que las cosas no eran como pensaba: que ser de izquierdas es compatible con ser millonario, que redistribuir la riqueza arrebatándosela al más rico para dársela a los pobres se llama "robar", que ser republicano no es querer eliminar la pobreza sino que es estar en contra del sistema monárquico, que a muchos ecologistas no les importa contaminar si es para uso particular, que ser cristiano o musulmán no es algo malo y que puede ser algo bueno, que el pacifismo está bien pero no resuelve la mayoría de terrorismos o guerras, etc.
¿Entonces ahora soy de derechas, religioso, militarista, etc.? No. No es blanco o negro. Es un reduccionismo y no soluciona los problemas de la vida. En muchos foros comprobarás con qué facilidad te etiquetan: o estás con nosotros o estás contra nosotros. Así no se puede.
Hay que discutir cada uno de los temas por separado, y ser de derechas o progresista o bolivariano, es irrelevante en cuanto al problema específico. Eso es como odiar la música de Wagner porque le gustaba a Hitler: escuchemos primero la música y luego opinemos.
Gastamos mucho tiempo discutiendo sobre etiquetas: derecha, izquierda, nación, español, golpista, violento, etc. Eso es estéril. Las etiquetas que asignamos a la realidad no son la realidad, igual que un dibujo de una pipa no es una pipa (aunque si nos preguntan qué vemos responderemos que vemos una pipa, cuando en realidad es un dibujo). Mientras tanto, las urgencias colapsadas, la deuda pública en máximos (¿qué proporción de los presupuestos generales del Estado son para pagar intereses?), etc. etc.
Slds.