Se hacen muchos gráficos del estilo del que les muestro a continuación, pero este tiene una ventaja adicional y es que se centra en el carácter psicológico y sociológico de los mercados, que es precisamente lo que les va a costar mucho llegar a entender y gestionar a los robots.
En un futuro no muy lejano, el analista financiero “estándar” podrá aportar poco valor añadido a la hora de detectar empresas baratas en términos puramente numéricos si tiene que enfrentarse a la inteligencia artificial. Ahora bien, lo que sí les va a costar a los robots es llegar a entender cuestiones como la avaricia, el miedo, el pánico, las modas, las manías o el comportamiento de rebaño.
Como verán, los conceptos del gráfico no son especialmente cuantitativos, pero les puedo asegurar en base a mi experiencia que son mucho más importantes que muchos factores cuantitativos. Los mercados tienen un componente psicológico y sociológico absolutamente fundamental y quien solo quiera ver la parte numérica está condenado a perderse una parte importante de las subidas y a sufrir muchos reveses con cambios de tendencia que sólo se explican por factores sociológicos como los que vamos a mencionar a continuación.
El ciclo sociológico y psicológico de los mercados
Antes de continuar me gustaría matizar que, de acuerdo con mi experiencia, eso de que los inversores institucionales (“Institutional Investors”) entran antes porque son más profesionales o más listos es, en muchas ocasiones, un mito.
Mi sugerencia es que no tengan mucho en cuenta la parte de arriba del gráfico, no me parece la más brillante. Sin ir más lejos, en la subida que ha tenido el mercado a lo largo de los últimos 12 meses han sido mucho más “espabilados” muchos pequeños inversores que muchos institucionales, que se sentaron cómodamente sobre sus bonos y ahora no saben muy bien qué hacer con ellos.
También me gustaría aclarar que cuando se habla de “Smart Money” (dinero “listo”, más que inteligente) puede incluir también a inversores particulares, como también hemos visto en las primeras fases de la recuperación postpandemia de las bolsas.
Para mí lo realmente interesante de este gráfico está en la segunda línea. Es donde vemos cómo en la primera fase de la subida los mercados no tienen ni siquiera la atención de los medios de comunicación. Llevado a la situación reciente, en la fuertísima subida que hemos vivido en estos últimos meses, la prensa y los medios en general, incluidas las redes sociales, hablaban mayoritariamente de lo caro que estaba todo, de la “burbuja” y de “la crisis”, cuando el mercado global ya había subido un 20 % sobre sus mínimos.
Éramos muy pocos los que recomendábamos abiertamente la inversión en renta variable, como bien saben los lectores de estos Cuadernos y los clientes de Nextep. En esta ocasión la atención de la prensa sobre los mercados es reciente, lo cual es una buena señal. Sólo hace un par de meses que han pasado de fijarse sólo en quienes anunciaban el Armageddon financiero a transmitir la realidad del mercado alcista.
Es un dato importante. Luego llega la fase del entusiasmo. Es más o menos en la que están ahora en EE.UU., pero todavía no en Europa y mucho menos en España, donde tenemos mucha menos tradición de inversión en bolsa. Pero la veremos, como se vio a mediados de los años 80, cuando la empresa Terra valía tanto como Endesa (MC:
ELE) en bolsa y se hablaba de la bolsa en bares, bodas y bautizos.
Luego viene la fase de la avaricia (“greed”). No creo que estemos todavía en ella. En todo caso es posible que esté empezando en el
Bitcoin, no en las bolsas mundiales. Veo anuncios de Bitcoin en marquesinas y mobiliario urbano, pero no veo ese tipo de anuncios en relación con las bolsas. Y del Bitcoin se habla en bares, bodas y bautizos, pero no veo yo que se hable de invertir en fondos de renta variable o en acciones.
Luego vienen las fases en las que, como consecuencia de la avaricia, la gente pierde el control y empieza a vivir en un mundo irreal —“Delusion”—, para finalmente llegar a la fase del “nuevo paradigma”, en la que dicho paradigma justifica cualquier exceso en los precios.
No creo que en lo que a las bolsas se refiere estemos todavía en esa situación, entre otras cosas porque he vivido varias similares y sé muy bien cómo es el ambiente que genera. Es muy importante saber identificar estas dos fases —“Delusion”, “Greed”— porque es claramente el momento de retirarse.
Aplicación práctica en una cartera de fondos
- Es importante leer este curioso gráfico teniendo en cuenta que hay diferencias por activos, sectores y países.
- Aunque no estemos en la fase final puede haber correcciones muy importantes en las fases intermedias.
- Las fases pueden superponerse. Y hay zonas grises.
- Estos gráficos deben considerarse en paralelo a la información cuantitativa (precios, inflación, beneficios, etc.).
- Podría ocurrir que estemos en una fase de simple entusiasmo pero con precios tan caros que en la práctica es como si estuviéramos en la fase del descontrol.