Hola Defensor:
Lo he probado. Por eso precisamente he comentado acerca de la herramienta. Justo la seguridad seguramente sea el aspecto más importante a la hora de tratar estos temas, y más como anda el patio, que no te puedes fiar ni de las redes wifi gratis ;-)
No poner los datos de nuestras tarjetas de crédito en webs no es una cuestión de miedo, sinó de sentido común. Por este motivo existen las tarjetas recargables y los sistemas de pago con intermediarios de confianza.
Cuando das tus claves a alguien no hay forma de saber qué hace con ellas. Y que alguien no pueda operar por ti no significa necesariamente que no te tenga que importar que esté al corriente de todas tus cuentas.
¿Qué significa seguro? ¿Qué no te puede hacer una transferencia?
¿Una entidad bancaria no puede tener interés en saber a qué diferencial está haciendo las hipotecas otra entidad o si los clientes de la competencia devuelven más recibos o menos que los propios? ¿Qué vendedor de seguros no estaría encantado de saber qué seguros tienes contratados y cuanto pagas por ellos? ¿Y qué cadena de supermercados no quisiera saber en qué otros establecimientos compras?
La información es poder. Y una herramienta como esta puede manejar muchísima información.
Entiendo lo que dices patufet777.
Como harías tu entonces para demostrar y convencer de que la privacidad, que como dices también es muy importante, se respeta? ¿Crees que es posible?
Esto es como todo. Lo nuevo al principio echa para atrás. Pero como todo se irá perdiendo el miedo y poco a poco nos iremos acostumbrando a este tipo de herramientas.
Muy útil parece que será ya que permite tener un control de los gastos de forma automática y sin necesidad de apuntarlos manualmente. Y si además te hace recomendaciones de ahorro según tus compras pues mejor aún.
Yo desde luego, teniendo la opción de comprometer mis datos o no hacerlo, prefiero no comprometerlos (lo que me ofrece ese servicio no me supone tanto como para asumir ese riesgo).
En cuanto a lo de las páginas web, efectivamente también uso recargables con el saldo necesario para efectuar la compra.
Saludos
Plataformas como Dinaru nos parecerán indispensables en muy poco tiempo. Suponen un gran ahorro de tiempo, dinero y problemas.
Para mí la cuestión es más bien quién se impondrá, si plataformas desarrolladas por entidades financieras o por independientes:
- Un banco establecido tiene la ventaja de que ya goza de la credibilidad necesaria para confiarle nuestros datos bancarios (de hecho ya los tiene). El problema es que no es objetivo ni imparcial en sus consejos y recomendaciones. Hay que añadir que en general no gozan de mucha simpatía.
- Las plataformas independientes tiene el inconveniente de que tienen que "hacerse un nombre" y ganarse la confianza. No hay más que ver lo que le ha costado arrancar a ING en España (y era de un gran grupo bancario holandés...). Un ejemplo de éxito de confianza en una plataforma independiente sería Paypal.
Cuando pienso en la gente que me rodea, a nivel de pago por internet, divido a las personas en dos:
1) Los que llevamos más de 10 años pagando con tarjeta en internet (y por todo el mundo) confiando en el sistema y en las garantías jurídicas y seguros (con unas mínimas precauciones, claro).
2) Los que nunca pagan por internet o utilizan tarjetas prepagadas u otras medidas que les da un plus de seguridad (están en su derecho por supuesto).
No sé si cada vez somos más los 1), pero cada vez los 2) siguen más rápido a los early adopters, por lo que creo que si DINARU ofrece una buena plataforma y logra (lo más importante) que la percibamos como totalmente segura.
Dicho esto, el vídeo me ha parecido muy claro y didáctico, Enhorabuena!
Saludos
Bueno, puestos a dividir, podemos dividir a las personas en dos grupos:
1) Las que dan sus datos bancarios o los de su tarjeta de crédito a cualquier desconocido.
2) Las que no.
Efectivamente, es un tema de confianza. A mi no me supone ningún complejo ser del grupo 2.
No es malo (y mucho menos hay que tener complejo por ser del grupo 2), pero yo nunca he dado mis datos a un desconocido. Desde hace más de 15 años he comprado billetes en Iberia, productos en el corte inglés, libros en tiendas americanas o inglesas con buena reputación...Y no tienen que ser multinaciones, ayer mismo me he comprado una cesta de navidad en Hermeneus.es, porque confío en ellos. También he comprado artículos por ebay a particulares con una gran reputación (99% de votos favorables en más de 100 transacciónes).
La clave es si Dinaru u otra plataforma independiente es capaz de genera esa confianza.
El tema de debate es interesante...¿cómo se genera esa confianza?.