Los automatismos de la banca/caja, en oficinas físicas
Cuando empezó el tema de internet, uno de los argumentos más recurrentes contra la competencia on-line era y sigue siendo el servicio y la calidad del mismo, lo cual es debatible, yo personalmente entiendo que para un particular con una nomina, unos cuantos recibos, algún depósito, un par de tarjetas, y si me apuras la cuenta de los niños, como que el servicio parece exactamente el mismo a través de banca on-line, ahora bien si es un particular que tiene algunas rentas de alquileres, gira recibos y tiene alguna actividad empresarial por pequeña que sea, es probable que esto del servicio y la banca física les suponga ciertas ventajas comparadas con las cuentas on-line, y que a la vez esta persona entienda que una oficina física tenga unos costes, y hasta cierto punto deba pagar algunas comisiones y gastos que no haría a través de banca on-line, en este sentido hace tiempo que detecto unas cosas que deseo poner en el foro porque no me parecen normales, y si bien no lo hice antes al considerarlo meras anécdotas, ahora con la implantación de la nueva normativa europea “Directiva de Servicios de Pago” creo que al menos en mi zona la cosa clama al cielo.
Partamos de la base que la banca física tiene capacidad para ofrecer un servicio diferencial a la banca on-line (dejando aparte que esto es muy opinable), normalmente las oficinas tienen “carterizados” a sus clientes con lo cual cada gestor tiene asignado un cierto número de clientes que él gestiona, que me parece (y no tengo pruebas) que son bastantes más de los que puede gestionar con el tiempo del que dispone, supongo que los bancarios de por aquí me confirmarán si estoy o no el cierto.
Últimamente para “aligerar” el trabajo de las oficinas, según manifiestan sus directores y apoderados hay procesos mecánicos que los hacen desde la central, uno de estos procesos es el cargo de los recibos que no “pasan” directo por el ordenador a las cuentas de los clientes, sea porque no hay saldo suficiente, porque si hay saldo pero está fuera por valoración, porque la cuenta tiene establecidos avisos de no pagar algunas cosas, y por otros motivos que ahora no se me ocurren. Según manifiestan estos bancarios estos procesos se hacían de manera manual en las oficinas, y ellos tenían la potestad de actuar en consecuencia, por ejemplo tomar la determinación de llamar al cliente, de devolverlo por la brava, o pagarlo sin saldo. Con este sistema centralizado esto se va bastante al carajo, y a clientes nuestros, no a uno sino a varios le ha provocado devoluciones las cuales tienen una explicación técnica, pero en mi opinión poco comercial, que va incluso contra la entidad financiera, y pongo dos ejemplos claros, que no son repito, casos aislados.
Ejemplo 1: Cliente con buenos saldos en cuenta, pero que en un momento concreto se encuentra sin saldo suficiente para atender a un recibo, pero a la vez esta persona mantiene saldos considerables en depósitos en dicha entidad, que además no son fruto de una campaña concreta y es cliente nuevo, sino que es cliente antiguo, vamos que media oficina le llama por el nombre de pila sin necesidad de mirar su cuenta, pues sin llamarle ni nada, van este invento devuelve el recibo que puede que solo sea de 150 euros, y los depósitos que tiene son de 30, 40.000 o más, os podéis imaginar el pollo que monta el cliente, porque aunque técnicamente no tenga razón, si sus cuentas las gestionan sistemas automáticos e impersonales, para que quiere uno una oficina, con la banca on-line basta y sobra.
Ejemplo 2: Un cliente que tenía una cuenta con un número determinado, por la razón que sea abre otra cuenta en la misma entidad y oficina y cancela la antigua, las entidades tienen por lo general aplicativos informáticos que “trasladan” todas las domiciliaciones para que aunque llegue con la cuenta anterior se carguen en la nueva, y aún cuando en estos casos es recomendable que uno proceda a notificar el hecho a sus proveedores, pero siempre se escapa algo y uno confía en que la automatización indicada funcione, pues bien casos como el anterior, clientes de calidad económica, que sin venir a cuento les devuelven el recibo tal y cual cuando hay saldo en la cuenta, todo porque el “traslado” ha petado por algún lado o el gestor se ha olvidado de incluir una pieza e la lista…. Si esto va a una oficina es probable que lo aplicasen correctamente, pero como vaya a una central ya la tenemos liada.
En fin …. Bienvenidos los automatismos, pero estos no deberían atentar contra el sentido común ….