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Pensionista

Un pensionista es una persona que recibe una pensión regular, generalmente proveniente de un sistema de seguridad social, como jubilación, invalidez, viudez u otros programas de beneficios similares. Estas pensiones son proporcionadas por el gobierno o por privilegios privados como una forma de apoyo económico para aquellos que han alcanzado cierta edad, han quedado discapacitados o han perdido a un cónyuge.

Un pensionista es una persona que ha llegado a una etapa de su vida en la que ya no trabaja, generalmente por haber alcanzado una cierta edad o por alguna otra circunstancia que le impide seguir en el mercado laboral. En lugar de recibir un salario, esta persona cobra una pensión, una especie de ingreso regular que le permite mantener un nivel de vida aceptable.

Ahora bien, las pensiones no caen del cielo, ni son un obsequio del Estado y la Seguridad Social. Son el resultado de años de trabajo y cotización al sistema de seguridad social. En esencia, es como si durante toda la vida laboral se hubiera estado ahorrando para este momento, pero de manera obligatoria y a a través de un sistema gestionado por el Estado.

Es interesante saber que hay distintos tipos de pensionistas. Aunque generalmente se asocian con la jubilación y los jubilados, también hay pensiones por incapacidad laboral, viudedad o incluso orfandad. Cada uno de estos casos responde a situaciones muy concretas que requieren que el Estado o un organismo similar intervenga para asegurar un mínimo bienestar económico a quienes ya no pueden generar ingresos propios.

Curiosamente, el término "pensionista" puede llevar a cierta confusión, especialmente para las nuevas generaciones que se están adentrando en el mundo laboral. Algunos pueden pensar que ser pensionista es como estar en unas largas vacaciones pagadas, pero la realidad es mucho más compleja. Las pensiones suelen ser cantidades mucho más modestas que los salarios, y no siempre se ajustan al coste de vida o las necesidades médicas que suelen aumentar con la edad.

Otra curiosidad es que, en la actualidad, con el envejecimiento de la población en muchos países, el sistema de pensiones está bajo gran presión. Hay más personas que requieren pensiones y menos trabajadores, trabajadores autónomos y empresarios que cotizan para sostener el sistema. Este desequilibrio ha llevado a numerosos debates y reformas para garantizar la viabilidad de las pensiones futuras.

Características de un pensionista


Un pensionista es alguien que ha pasado a una fase de su vida en la que recibe una pensión en lugar de un salario. Pero, ¿qué características definen a un pensionista? 

Vamos a verlo con claridad:

  • Edad: Lo más común es que los pensionistas sean personas que han alcanzado la edad legal de jubilación. No obstante, hay excepciones como pensionistas por incapacidad o por ser huérfanos.
  • Historial de cotización: Normalmente, para ser pensionista hay que haber cotizado un número mínimo de años al sistema de seguridad social. Ese período varía según el país y el tipo de pensión.
  • Ingresos regulares: Los pensionistas reciben una cantidad periódica, que puede ser mensual o como se estipula, a modo de pensión. Este es su ingreso principal, y por lo general es menor que el salario que recibían cuando estaban en activo.
  • Variabilidad de la pensión: Dependiendo del caso, la cantidad de la pensión puede variar. Por ejemplo, una pensión por jubilación será diferente de una pensión por viudedad o incapacidad.
  • Residencia: Habitualmente, los pensionistas deben residir en el país que les otorga la pensión, aunque hay acuerdos entre naciones que permiten recibir la pensión viviendo en el extranjero.
  • Cambios en el estilo de vida: Pasar a ser pensionista conlleva cambios importantes en el día a día. Menos ingresos y más tiempo libre son dos de los más evidentes.
  • Cobertura sanitaria: En muchos sistemas, los pensionistas tienen acceso a cobertura sanitaria, algo fundamental especialmente en edades avanzadas.
  • Vinculación al IPC: En algunos países, las pensiones están vinculadas al Índice de Precios al Consumo (IPC), lo que significa que se ajustan con la inflación para mantener el poder adquisitivo.
  • Beneficios sociales: Además de la pensión, los pensionistas suelen tener acceso a diferentes beneficios sociales, como descuentos en transporte, actividades culturales o ayudas para el hogar.
  • Limitaciones para trabajar: Por lo general, ser pensionista implica ciertas restricciones para seguir trabajando y cobrando un salario completo, aunque hay excepciones y modalidades que permiten compatibilizar pensión y trabajo.

En esencia, el pensionista es aquel que recibe una pensión, pero como podemos apreciar, todos presentan una serie de características que le llevan a recibirla.

Requisitos para ser pensionista


Ser pensionista no es algo que ocurra de la noche a la mañana. Hay una serie de requisitos que debes cumplir para recibir una pensión. 

Aunque las condiciones específicas pueden variar según el país y el tipo de pensión, vamos a hablar de los criterios más comunes que se aplican en el caso de las pensiones de jubilación en España.

  • Edad de jubilación: En España, la edad legal de jubilación está en proceso de aumento gradual. Para 2021, por ejemplo, la edad de jubilación era de 66 años. Esta edad continuará subiendo hasta llegar a los 67 años en 2027.
  • Años cotizados: Además de la edad, debes haber cotizado un mínimo de años para tener derecho a una pensión. En España, el mínimo actualmente es de 15 años, aunque la cantidad de la pensión aumenta con más años cotizados.
  • Cotización en los últimos años: Para calcular la cantidad de tu pensión, se toma como referencia lo cotizado durante un determinado número de años antes de la jubilación. A más años cotizados y mayores bases de cotización, mayor será la pensión.
  • Situación laboral: Generalmente debes haber cesado en tu actividad laboral para poder recibir una pensión de jubilación. Existen excepciones y modalidades, como la jubilación activa o parcial, pero en la mayoría de los casos, se exige el cese en la actividad.
  • Residencia: Habitualmente, deberás ser residente en España para recibir una pensión española, aunque hay convenios internacionales que pueden permitirte recibir tu pensión en el extranjero.
  • Documentación: Como en cualquier otro trámite administrativo, necesitarás presentar una serie de documentos para solicitar tu pensión. Entre estos, el DNI y el informe de vida laboral son esenciales.

Si cumple con estos requisitos, tendrá derecho a recibir una pensión de jubilación. No obstante, hay otros tipos de pensiones como las de incapacidad, orfandad o viudedad, cada una con sus propios requisitos.

La Seguridad Social y los pensionistas


La Seguridad Social en España juega un papel crucial en la vida del pensionista. Podríamos decir que es como un gran colchón de seguridad que te acompaña durante toda tu vida laboral para que, cuando llegue el momento de colgar las botas, puedas vivir con dignidad y tranquilidad.

  • Fuente de ingresos: Lo más evidente es que la Seguridad Social es la entidad que se encarga de pagar la pensión a los pensionistas. Este ingreso es vital para mucha gente que, al dejar de trabajar, necesita una fuente de ingresos para mantener su calidad de vida.
  • Cálculo de la pensión: La Seguridad Social realiza el cálculo de cuánto vas a recibir en función de las cotizaciones que hayas aportado durante tu vida laboral. En base a una fórmula, se determina la cantidad que te corresponde.
  • Asistencia sanitaria: La afiliación a la Seguridad Social también garantiza el acceso a la asistencia sanitaria pública. Es decir, aunque dejes de trabajar, seguirás teniendo derecho a ir al médico, recibir tratamientos y demás, sin costo adicional en la mayoría de los casos.
  • Actualizaciones y revalorizaciones: La Seguridad Social también se encarga de actualizar las pensiones conforme al IPC u otros mecanismos que aseguran que la inflación no erosione el poder adquisitivo de los pensionistas.
  • Gestión y trámites: A través de la Seguridad Social, los pensionistas pueden realizar una variedad de trámites relacionados con su pensión: desde solicitarla, hasta consultar el estado de su expediente, pasando por cambios en la cuenta bancaria donde se recibe el pago.
  • Información y orientación: La Seguridad Social ofrece información y orientación para que sepas qué pasos debes seguir en tu camino hacia la jubilación, o en casos de pensiones por incapacidad, viudedad, etc.

Por tanto, la Seguridad Social es como un compañero de viaje en esta nueva etapa como pensionista. Gracias a ella, se garantiza una pensión, se accede a servicios sanitarios, y se asegura que esta cantidad se actualizará con el tiempo, entre otras cosas.

¿Es lo mismo jubilado que pensionista? No siempre


Aunque en el lenguaje común muchas personas usan los términos "jubilado" y "pensionista" como si fueran sinónimos, la realidad es que no lo son, y cada uno tiene sus particularidades. Vamos a aclarar estas diferencias para que no haya confusión.

Un "jubilado" es alguien que ha dejado de trabajar debido a su edad o alguna otra razón que le permite acogerse a la jubilación. Esto no significa necesariamente que esté recibiendo una pensión. Puede que tenga otras fuentes de ingreso, como ahorros, inversiones o incluso puede que no reciba ninguna cantidad si no ha cotizado el tiempo suficiente para tener derecho a una pensión.

Por otro lado, un "pensionista" es una persona que recibe una pensión de la Seguridad Social o de otro sistema público o privado. Ahora bien, esta pensión no tiene por qué ser únicamente por jubilación. Hay varios tipos de pensiones: por incapacidad, por viudedad, por orfandad, etc. Así que, un pensionista puede ser alguien que no ha llegado a la edad de jubilación pero que, por alguna razón, recibe una pensión.

En resumen, no siempre un jubilado tiene por qué ser un pensionista, ni un pensionista ser un jubilado. Podríamos tener, por ejemplo, un jubilado que no recibe pensión porque no ha cotizado el tiempo mínimo necesario. O podríamos tener un pensionista que es una persona joven que recibe una pensión por incapacidad.

Ejemplo de pensionista


En definitiva, la figura del pensionista es más versátil de lo que podría parecer a simple vista. Ya hemos visto que un pensionista es alguien que recibe una pensión, ya sea por jubilación, incapacidad, viudedad u orfandad, entre otras razones. Pero para ilustrar mejor todo lo que hemos comentado, vamos a poner un ejemplo que nos ayude a entender de manera más clara el concepto de "pensionista".

Imaginemos a Ana, una mujer de 55 años que trabajaba en una fábrica. Hace unos años sufrió un accidente laboral que le provocó una incapacidad permanente y le imposibilitó seguir trabajando en cualquier empleo. Desde ese momento, Ana empezó a recibir una pensión por incapacidad. Aunque no ha llegado a la edad de jubilación y no ha dejado de trabajar por esa razón, sí es una pensionista, ya que recibe una pensión por parte de la Seguridad Social.

Ana es un claro ejemplo de cómo se puede ser pensionista sin necesidad de estar jubilado. Su situación nos demuestra que las pensiones no son exclusivas de las personas mayores que han dejado de trabajar por llegar a una determinada edad, sino que pueden afectar a personas en diversas etapas de la vida y por distintas circunstancias.

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Pensionista, Francisco Coll, 05 de septiembre del '23, Rankia.com
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