- Demandantes de empleo OCUPADOS, que son los que hacen cursillos (661.239 personas).
- Demandantes de empleo con disponibilidad limitada (aquellos SIN EMPLEO que indican en solicitud condiciones especiales de trabajo como sólo a domicilio, teletrabajo, extranjero, etc...) que suman 157.706.
- Demandantes de empleo NO OCUPADOS (DENOS). Aquí a partir de Febrero del 2008, el ex-ministro Caldera y por tanto el gobierno, se dividió éste colectivo en dos partes. Por un lado tenemos los parados registrados, que es el dato oficial que reconoce el gobierno como los parados que hay (2.818.026). Y por otra parte tenemos dentro de los DENOS, el colectivo "otros no ocupados" que son aquellos que "necesitan servicios previos al empleo", vamos que son el tan cacareado TIPPEX de Caldera, de gente que supuestamente "necesita" unos servicios previos como cursos, etc. para aparecer en las listas.
En conclusión, si en Febrero del 2008 no se hubiera empezado a usarse el TIPPEX de Caldera, ahora mismo tendríamos casi 3.100.000 parados registrados RECONOCIDOS y no 2.818.000. Y otra cosa, el Nº REAL DE PARADOS, esto es, de DEMANDANTES DE EMPLEO es de casi 4.000.000 de personas, 3.902.508 concretamente. Si tenemos en cuenta que el Nº de afiliados es ahora mismo de 18.900.000 afiliados a la SS, la cifra REAL de paro es del 17,09% de paro.
Casi nada ¿verdad? Por cierto, que no nos sigan vendiendo la moto. El aumento del paro no está siendo a nivel global ni de largo como en España. Paises como Alemania han creado empleo el último mes. Recomiendo encarecidamente que leáis este brillante análisis de la patraña que nos siguen intentando vender algunos.
Es lo que hay, es nuestro modelo, y mientras sigamos ahí sólo iremos a peor. No veo ni al gobierno ni a la oposición con narices para lidera un cambio que llevan más de una década alimentando y que ya no da de sí. Necesitamos un Obama a la española, y ojo, él ha creado ilusión en un país, pero aún tiene que demostrar su valía, no sea que se quede en agua de borrajas como nuestros vecinos del norte con Sarkozy. Desde luego, ninguno de los políticos actuales parece capaz de gestionar ni lidiar con los duros tiempos que se nos avecinan.
Jaime