Recuerdo una vez cuando unos capacitadores chilenos vinieron y yo era parte de los "beta testers" de un juego de empresa donde habia que comprar materia prima y vender producción. Era un juego con 6 equipos de 4 personas y se jugaba en turnos, llevando contabilidad y todo, y la venta de producto era por subasta. El juego duraba como 4 horas.
Recuerdo que hubo una ocasión en que le ofrecimos a un competidor comprarle la mercadería, de modo que le quedaba un margen de ganancia. Ellos se negaron porque pensaron "si nos quieren comprar a ese precio es porque van a ganar más" y al final no pudieron vender al precio esperado y fueron la empresa con mayores pérdidas y nosotros la de mayores ganancias.
Eso me enseñó que el tacaño nunca gana nada. Ellos pensaron que iban a poder sacarle más ganancia pero carecían de estrategia y de información.
El error de ellos fue que pensaron tener más posibilidades de las que realmente tenían de vender sus bienes en subasta.
La estrategia nuestra era de especulación, encontrar momentos de picos bajos de oferta para ofrecer a un precio mayor. Hubo un momento de tremenda escasez donde el moderador del juego limitó el precio señalando que el gobierno había regulado los precios, porque había condiciones monopólicas, lo cual me indicó la necesidad de la regulación de procesos especulativos para evitar bandazos en el mercado.
Y aún así fuimos la primera empresa en ganancias, con una diferencia abismal respecto de las demás, a pesar del recorte regulatorio.
También aprendí que se podía lograr ganancias con tratos entre empresas, aunque no se tratara del "core business". Obviamente los negocios al margen debían ser reportados al moderador, que llevaba los números.
En el juego los ánimos se calentaban y el moderador tenía también que moderar a la gente y recordarles que era sólo un juego.