El análisis financiero tiene como objetivos comparar las diferentes partidas del activo y pasivo en volumen y plazos temporales. Con todo ello podemos:
- Analizar si la empresa mantiene equilibrio financiero.
- Analizar las diferentes fuentes de financiación y plazo temporal utilizadas.
- Diagnosticar y prever las posibles dificultades financieras a las que pudiera enfrentarse la empresa en un plazo temporal estipulado. Es decir, la capacidad de atender las deudas a su vencimiento.
Para ello hay que determinar el grado de liquidez, la capacidad de endeudamiento y su expansión. Para su obtención la forma habitual es la utilización y estudio de ratios de liquidez y endeudamiento.
La liquidez (solvencia a corto plazo) nos permite comprobar si la empresa se encuentra con una buena salud financiera y poder atender las deudas contraídas a corto plazo. Es decir la capacidad puntual de convertir los activos en líquidos en el corto plazo.
El pasado día 23 os hablaba del ratio de liquidez, os dejo el link del artículo https://www.rankia.com/blog/finanzas-bolsa/4922305-analisis-financiero-ratios-liquidez.
Los ratios de endeudamiento sirven para realizar un diagnostico sobre la calidad y cantidad de deuda que tiene la empresa, así como en qué nivel se encuentra capitalizada o descapitalizada. Para ello se emplean los siguientes ratios:
- Ratio de endeudamiento. Nos permite conocer la intensidad de la deuda de la empresa comparada con los fondos de financiación propios, detectando él % de repercusión de financiación de terceros. Y nos informa en qué medida a utilizado los recursos financieros ajenos para financiar sus inversiones. Su valor óptimo es situarse en torno a 1.
- Ratio de garantía. Este ratio nos mide el total de las deudas del pasivo, sobre el volumen total del activo. Y nos proporciona un ratio de credibilidad financiera de la empresa frente a terceros. Su valor óptimo se encuentra entre 1,5 y 3.
- Ratio de firmeza o consistencia. Este ratio relaciona el activo no corriente con el pasivo no corriente, proporcionando el grado de seguridad frente a los acreedores a largo plazo. El valor óptimo se sitúa en torno a 2.
- Ratio de estabilidad. Esta ratio nos muestra de forma porcentual la parte del activo no corriente que está financiada con el patrimonio neto. Su valor óptimo varía dependiendo el sector en el que se encuentra la empresa.
Conocer los ratios, qué información nos aportan y los valores óptimos nos ayudan con una visión rápida a conocer la salud financiera de la empresa.
Combinando estos ratios con el volumen de ventas, los beneficios de explotación, beneficios financieros y BPA “beneficio por acción”, nos permite tener una radiografía de la empresa en pocos minutos.
La utilización de esta información nos ayudará a filtrar riesgos y combinando estos análisis fundamentales con los análisis técnicos” acción del precio, indicadores, etc.” representan una herramienta muy útil y poderosa para conseguir el éxito en nuestras inversiones.