"Es mejor llegar temprano a la fiesta de la inversión e irte pronto que quedarte para la fase de euforia y el colapso siguiente" - leído en el libro Código Rojo de Jonathan Tepper y John Mauldin
A vuelto a ocurrir lo de siempre... cuando los rezagados de la fiesta se decidían a incorporarse a la misma el mercado decide volverse racional y siembra de números rojos las carteras. Mientras éstos culpan a los especuladores, el mercado busca encontrar sus fundamentales más allá de la euforia provocada por el dinero gratis de los bancos centrales.
Lo más normal ante situaciones desconocidas es contestar con un "es una corrección del mercado" o "es normal, ante tanta euforia estaba claro que venía una corrección". Como siempre, fácil opinar cuando el hecho ya se ha consumado. Pero en julio todos sonrientes preparando las maletas.
¿Grecia? ¿China? ¿El petróleo? ¿Las divisas? La tormenta perfecta. Todo, absolutamete todo, en rojo y... sin vender, pues esto parará ¿por qué lo hará, verdad?. Y, la verdad, siempre tiene más valor si conseguimos ilustrarla.
Como vemos las políticas de tipos cero y de inyección masiva de liquidez por parte de los distintos bancos centrales en los diferentes territorios en los que actúan ha provocado un auténtico tsunami en los mercados financieros: los tranquilos ahorradores se han visto obligados a abrazar al riesgo como aliado para intentar mantener su nivel de rentas, en esa huida hacia al riesgo se han encontrado con el festín en las bolsas provocado por el exceso de liquidez con el que han drenado los mercados disparando las valoraciones por encima de los fundamentales de las empresas y llenando los sueños de los inversores de sensaciones de riqueza. Sí, sueños. Para que la sensación sea real debe materializarse la ganancias.
"Los precios de las acciones suben rápidamente cuando una moneda se debilita y la oferta de dinero crece"
Y, como es natural, cuando el telón cae aparecen las verdades y, en este caso, con ellas las incertidumbres. Por eso, la volatilidad ha aumentado tal y como podemos ver en el siguiente gráfico:
Como podemos observar, la volatilidad actual no se acerca ni mucho a la vivida a finales de 2008. Pero no lo confundamos con una mera corrección. No debemos caer en ese error pues la situación actual es completamente anómala en cuanto al papel determinante que han decidido jugar los distintos bancos centrales.
Lo que es innegable es que los precios actuales sí pueden ser una gran oportunidad para comenzar a construir una cartera sólida que permita que nuestro patrimonio consiga crecimientos sostenidos en el medio, largo plazo. Traigo a colación otra cita del libro Código Rojo: "El truco para aumentar tu capital no consiste en ganar una fortuna en un solo año, sino en evitar las pérdidas".
Hay mucho valor en los mercados pero exigen por su parte que hagan los deberes en cuanto a conocer dónde van invertir su dinero (equipo, estados financieros, plan de negocio) y si no pueden hacerlo confíen en gestores cuyo principio sea la aportación continua de valor a sus partícipes.
Iremos desgranando unos y otros en próximos articulos
Derechos de la imagen: Vit Paroulek
