Decir Navidad en Japón es sinómimo de Black Friday para KFC. Y es que, KFC (Kentucky Fried Chicken), la cadena americana de pollo frito hace su agosto en Navidad. De acuerdo a KFC, en Ashiya, el dueño de una de las franquicias, en 1970, observó como un hombre que intentaba comprar pavo en la noche de Navidad y finalmente acabó desistiendo y compró pollo frito de la cadena. La idea llegó hasta las oficinas centrales de la compañía que decidió realizar una macrocampaña de marketing en el año 1974 dando así comienzo a la tradición de los japoneses de comer KFC. La campaña publicitaria se llamó “Kurisumasu ni wa kentakkii!” (Kentucky for Christmas!).
Es muy cierto que hay que poner las cosas en contexto, porque no cualquier cosa sirve para generar dinero. La dieta japonesa, cuando la campaña fue lanzada, era muy saludable, y comer pollo frito y grasiento un día les podía parecer divertido e interesante porque luego volvían a su dieta normal. Este tipo de estrategias no habría tenido ningún éxito ni sentido para otros países, como sería España, pero de la historia si que podemos sacar un aprendizaje: Se deben tener la mentalidad apropiada y los ojos abiertos en todo momento, incluso el día de Navidad, porque las ideas están rondando y nunca avisan.
Esta noche, yo no cenaré pollo, me ha costado bastante caro pero yo también cenaré langostinos a la plancha y carne de ternera. Así que a mis padres, hermana, familiares, amigos y lectores del blog quiero deciros que estaré bien y desearos Feliz Navidad.
Lucía a ti te deseo también feliz cumpleaños para mañana. No recibirás ningún regalo de mi parte pero te dedico la historia de KFC en Japón porque tienes dos años por delante muy relevantes en tu vida y espero que esta historia te ayude a afrontarlos con ilusión y fuerza.
Saludos,
P.