Según las últimas noticias será la banca Rothschild quien dirigirá la OPV de Loterías del Estado. Se trata de una empresa familiar que puede presumir de sobrevivir durante 5 generaciones, algo muy poco habitual.
La dinastía Rothschild comenzó en 1744 en Frankfurt, dónde nació Meyer Amschel, este tuvo 5 hijos varones que ya llevaban el apellido Rothschild.
Ejerciendo el oficio de prestamista y cambista, Meyer Amschel fue nombrado proveedor oficial de la corte de Hesse con 25 años. En aquellos tiempos en que tener y transportar dinero era llevar monedas o lingotes encima, esto era altamente peligroso, por lo que contar con mercaderes o cambistas que hicieran uso de su palabra y de su firma para evitar el transporte físico, además, al ser alguien alejado de la comunidad bancaria era mucho más discreto y rápido. Así comenzó todo. En 1800, los Rothschild pasaron a ser agentes del emperador austríaco en Viena, empezaron a hacerse cargo de las inversiones de su príncipe, muchas veces en forma de préstamos entre estados.
A medida que aumentaban sus transacciones, también crecía su fama de absoluta lealtad entre los miembros de la familia, discreción en el manejo de los negocios ajenos, rapidez y eficacia en su papel de intermediarios para enviar mensajes y dinero, y , sobre todo, un profundo sentido del honor que les impedía engañar a sus clientes. Todo estas cualidades hizo que sus clientes confiaran en ellos.
El hijo mayor, Nathan, se marchó a Inglaterra con 21 años, llevando consigo parte de la fortuna familiar. Otro de los hijos, James, se instaló en Paris, cerrando el círculo de la cadena que hizo posible la circulación a tres bandas de oro y letras de cambio entre Inglaterra, Francia y el resto del continente europeo bajo el bloqueo en las guerras napoleónicas. Se dice que Napoleón fue derrotado en el campo de batalla financiero.
La red de de bancos que crearon hacían posible que las obligaciones de un país pudieran emitirse en todas las monedas importantes, de ese modo, los obligacionistas cobraban en su moneda propia, aquello fue una gran innovación que supuso una ventaja frente a sus competidores.
Los Rothschild se convirtieron en personas de confianza necesarios para los distintos monarcas europeos dónde estaban instalados, con información de primera mano y capacidad de susurrar al oído, intentando sofocar los ánimos encendidos, ya que los negocios prosperan con la paz y la guerra iba en contra de sus intereses.
Poco tiempo después, ampliaron sus negocios a las lineas de ferrocarril, extracción de materias primas como plomo, mercurio, oro, petróleo, etc, pasando de financiar los proyectos de los distintos monarcas a invertir directamente en el capital de distintas empresas.
Hay mucha gente que se adapta a las circunstancias, pero este es un ejemplo claro de quienes han adaptado las circunstancias a sus necesidades.
Adela Alba
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