Francisco Rodríguez d’Achille
Socio I Director de desarrollo de negocio
¿Qué mejor nicho que el de pequeñas y medianas compañías para posicionarnos en modelos de negocios ligados a la innovación y a la digitalización en general? Además, ¿con qué ventaja competitiva cuenta el ecosistema europeo para ofrecer este tipo de compañías?
Para nosotros en LONVIA Capital, un modelo de negocio exitoso en un segmento como el de las pequeñas y medianas compañías se caracteriza por la constante reinversión de sus beneficios netos con el objetivo de crecer de forma constante y, al mismo tiempo, sostenible. Esta reinversión puede canalizarse de muchas formas, pero nosotros nos centramos en algunas particularmente:
1) Dedicar recursos a la innovación y mejora de sus procesos operativos para ganar eficiencia y mejorar constantemente sus márgenes.
2) Contratación de talento humano y desarrollo de recursos internos
3) Inversión en desarrollo de nuevos productos que permitan la captación de nuevos clientes y, cerrando nuestro “circulo virtuoso del crecimiento”
4) Que sean compañías que miren fuera de sus fronteras, ampliando sus ventas en mercados internacionales a través de posibles adquisiciones que puedan representar un salto importante en su capitalización bursátil durante los próximos años, conquistando así alta cuotas de mercado en otras regiones.
Para identificar a esos campeones del mañana es necesario entender qué es la compañía hoy y cuáles son esos drivers de crecimiento, pero, igual de importante, es poder prever en que se convertirá esa compañía en los próximos 3 o 5 años.
Generalmente, estos modelos de negocios cuentan con un know how único dentro de su nicho de especialización y esto les proporciona una serie de barreras de entrada importantes para preservar su cuota de mercado, poder establecer una política de precios competitiva y seguir expandiéndose en un entorno de menor competencia. Además, en muchas ocasiones, son compañías que parte de su capital está aún en manos de la familia fundadora, característica que le da una ventaja competitiva de gran valor: un proceso de toma de decisiones basada en el largo plazo.
Una vez comentada nuestro posicionamiento sobre el tipo de compañía que nos gustan y que integrarán nuestras carteras, hablemos de Europa.
Seguramente si nos hacemos la pregunta, ¿qué regiones lideran el sector tecnológico a nivel global?, muchos inversores responderán de forma sesgada: EEUU ó China. Pero la verdad es que Europa hace muchas décadas que viene desarrollando un know how único en algunos sectores de gran relevancia para los avances que hemos tenido como sociedad durante los últimos años. La tecnología médica, la digitalización, automatización de la industria en general, la robótica o la industria 4.0 son sectores en donde Europa juega un rol de liderazgo a nivel global. Compañías como la alemana Carl Zeis Meditec, dedicada al desarrollo de equipos para cirugía ocular y micro-cirugías de cerebro con una expansión muy importante en Asia a través de China y Corea del Sur, o casos como ASML fundada en Holanda en el año 1984, una compañía que produce semiconductores para la automatización de la industria manufacturera con una cuota altísima de mercado en EEUU a través de la inclusión de sus chips en los móviles de Apple, son claros ejemplos de que Europa se encuentra a la vanguardia de la tecnología y que es un know how difícilmente replicable.
Para complementar nuestra convicción por estos modelos de negocios que surgen como players locales europeos y que terminan por convertirse en destacadas compañías globales, queremos mencionar el enorme compromiso en materia ESG que se lleva desarrollando y poniendo en práctica en suelo Europeo desde hace muchos años. Según los datos del último informe de Morningstar, “European Sustainable Funds Landscape”, con datos a finales de 2020, Europa sigue jugando un rol pionero en el desarrollo de productos de inversión bajo criterios de sostenibilidad y de impacto. Solo en 2020, los flujos de entrada en este tipo de estrategias doblaron el importe de 2019, con 100 mil millones de euros de dinero nuevo. Además, desde un punto de vista de nuevos lanzamientos de producto, Europa también lidera la oferta global con un total de 3.196 fondos bajo la etiqueta de fondos sostenibles, de este total, unos 505 fondos han sido lanzados al mercado solo en 2020.
El compromiso europeo por integrar de forma estructural criterios ESG de forma clara y armonizada es total. Y lo podemos verificar a través de la reciente regulación, puesta en marcha desde el mes pasado (Marzo 2021), la SFDR (Sustainable Finance Disclosure Regulation). Que obliga a todos los participantes del mercado financiero: asesores financieros, gestores de activos, sociedades de inversión, instituciones de crédito que proporcionan una gestión de cartera, fondos de pensiones y compañías de seguros, a calificar su política de integración de criterios ESG a través de 3 artículos específicos: 6, 8 ó 9, dependiendo de cuan vertical sea la aplicación de estos criterios al momento de incorporarlos en cartera. LONVIA Capital califica dentro del artículo 8: cubriendo los activos financieros que promueven características ambientales o sociales en el marco de una estrategia de inversión más amplia.
La lectura final luego de la integración de todas estas cuestiones mencionadas en el artículo, sería: pequeñas y medianas compañías europeas con sesgo de crecimiento sostenible, uno de los mejores nichos de mercado para invertir en los campeones del mañana.