Re: Total, si ya no matan…
Las cunetas siguen llenas de muertos por el genocidio franquista.
El silencio es hermoso cuando no es impuesto.
Las cunetas siguen llenas de muertos por el genocidio franquista.
El silencio es hermoso cuando no es impuesto.
Y en ese caso si se conoce el autor "intelectual"
pues me gustaria que buscarais a unos familiares mios que les tiro con una piedra atada al cuello por los acantilados del faro de santander la guardia de asalto en 1936, sus unicos crimenres uno ser sacerdote y el otro simpatizante de falange
saludos
por la memoria historica de TODOS
Fue testigo, durante la dominación roja en Cantabria, de un sin fin de horrendos crímenes cometidos por aquellos forajidos que se proclamaban leales al Gobierno de la República... Desde lo alto eran arrojadas las pobres víctimas que caían sobre las erizadas rocas y eran arrastradas por las olas..
Martirio de la comunidad de Trapenses
Como ejemplo de barbarie allí cometida, comentaré lo ocurrido con los monjes trapenses de Viaceli, cerca de Cóbreces, que fueron expulsados de su monasterio el 8 de septiembre de 1936 por agentes de la Federación de Anarquistas Ibéricos (FAI). Metidos en prisión, luego fueron puestos en libertad: Algunos se dispersaron en casas privadas, otros pudieron llegar a Bilbao donde no había una persecución religiosa violenta, otros se reagruparon en Santander, formando así tres pequeñas comunidades que trataban de mantener la vida monástica de modo oculto.
Probablemente por un plan premeditado de aniquilación y a causa de una delación, el 1 de diciembre fue arrestado un grupo compuesto solamente por hermanos conversos. La policía marxista decía querer conocer de dónde provenían sus medios de subsistencia, pero el Prior, Padre Pío Heredia Zubía (18751936) no quiso manifestar en modo alguno el nombre de quien les ayudaba. Después de penosos interrogatorios y malos tratos durante el proceso instruido en la noche del 2 de diciembre, se llegó a su ejecución. El proceso fue para dar una apariencia de legalidad a la condena de los religiosos, pero en realidad todo fue por odio de la fe. Según el testimonio de un oblato de quince años, que se encontraba con los monjes y que luego fue liberado, los religiosos fueron subidos en un camión en dos grupos separados, uno en la noche del 3 de diciembre, y el otro en la noche siguiente. De estos hermanos no se supo nada más. ¿Arrojados al mar contra las rocas del faro de Santander o conducidos en barca y hundidos en las aguas profundas de la bahía? La primera hipótesis parece la más probable, testimoniada por alguien que lo oyó a uno de los ejecutores.
[3] Por otra parte era el método que solían utilizar con simpatizantes de las derechas. Dejo constancia de los nombres de estos mártires despeñados en Cabo Mayor
[4]. En la noche del tres de diciembre de 1936:
Padre Prior JULIÁN HEREDIA ZUBIA de nombre religioso PÍO
MARCOS GARCÍA RODRÍGUEZ de nombre religioso AMADEO
VALERIANO RODRÍGUEZ GARCÍA
JUAN FERRIS LLOPIS
ALVARO GONZÁLEZ LÓPEZ
FRANCISCO DELGADO GONZÁLEZ de nombre religioso ANTONIO
Y en la noche siguiente, cuatro de diciembre:
JACINTO GARCÍA CHICOTE de nombre religioso EUSTAQUIO
FRANCISCO DE LA VEGA GONZÁLEZ de nombre religioso ÁNGEL
EZEQUIEL ÁLVARO DE LA FUENTE
EULOGIO ÁLVAREZ LÓPEZ
ROBUSTIANO MATA UBIERNA de nombre religioso BIENVENIDO
Unos días después el mar devolvió a la costa los cadáveres de algunos. Varios aún conservaban las ligaduras de las manos a la espalda y los labios cosidos con alambre.
Asalto al barco-prisión
Durante aquellos tiempos de guerra, el ambiente que se respiraba en la región era de total tensión y crispación, a causa de los registros domiciliarios, requisas, robos de automóviles, detenciones continuas... que sufrían aquellos que no pertenecieran a grupos de izquierdas
La cárcel y desde el 18 de Julio de 1936, el buque mercante
“Alfonso Pérez”, amarrado en los muellesde Santanderse llenaron con hombres de derechas, un sin número de sacerdotes, religiosos, militares y simples católicos que, en parte, fueron asesinados en el cabo Mayor y en su mayoría en el mismo buque.
Esta persecución a miembros de la iglesia, católicos en general y simpatizantes de la derecha española, se acrecentó por las incursiones de la aviación franquista, siendo la más grave la realizada el 27 de diciembre de 1936 por 18 aviones italianos, que produjo unos 68 muertos y 50 heridos entre población civil. La venganza fue terrible. Al día siguiente, las hordas encolerizadas, encabezadas por el consejero de Justicia, Quijano; el comisario de Policía, Neila [5]; el gobernador civil, miembro de las Juventudes Socialistas, Ruiz
Olazarán, y el anarquista Hermenegildo Torres
[6], se lanzaron contra el barco prisión Alfonso Pérez a la voz de ¡Al barco, al barco!. Comenzó entonces una masacre ametrallando a los prisioneros en la cubierta o bien arrojándoles bombas de mano a las bodegas en que se encontraban hacinados
[7]. En esta masacre murieron 155 presos y a otros seis les llevaron al paredón de Ciriego, donde fueron fusilados.
Barco prisión Alfonso Pérez
No reflexionaron las turbas en la responsabilidad que, por sus propias víctimas, correspondía a sus autoridades por la falta de previsión en la creación de refugios. Lo hicieron posteriormente, según se deduce de su actuación, ya que este bombardeo hizo cambiar el plan de refugios. Hasta ese momento -explica el investigador José María Alonso del Val- sólo había veinte, y en poco tiempo se duplicó su construcción
[8]. Aunque demasiado tarde, fue una manera de admitir su responsabilidad y culpa en tantas muertes y venganzas.
Personalidades como Concha Espina en “Retaguardia” y Luis Araquistain en “Por los caminos de la guerra” cuentan también estos terribles asesinatos.
Dice Araquistain:
“Quien se asome a la baranda del faro, si es cristiano, hará que suba a sus labios una oración como encendido holocausto a los pobres mártires asesinados en el faro del cabo Mayor por la
barbarie roja”.
Un monumento junto al acantilado
En homenaje a aquellas personas que fueron arrojadas al acantilado durante la Guerra Civil Española con consentimiento del gobierno republicano, se erigió en 1941 este monumento costeado por la Jefatura Provincial del Movimiento siendo alcalde de la ciudad don Emilio Pino Patiño.
De su realización se encargaron Lavín del Noval, arquitecto municipal, y José Villalobos, escultor castreño.
Este majestuoso monumento de piedra porosa consiste en una cruz a cuyo pie ha sido esculpida la figura de un hombre con los brazos y manos alzados, asiéndose a la cruz y con su cuerpo destrozado. Impresionante.
Esos se tiraron solos, por el aburrimiento que tenían de escuchar tus rollos.
El silencio es hermoso cuando no es impuesto.
y luego dices.....tus bromas no tienen gracia
Si no era una broma, si lo decía en serio.
no creo, juan tiene corazon
saludos
Maite Pagaza en una gran hipócrita. Eso sí que revuelve el estómago.
La imagen no es grave para nadie porque es absolutamente rutinaria. Algunos demonizan lo que ellos hacen habitualmente, son peores que los fariseos.
El silencio es hermoso cuando no es impuesto.
amigo te retratas tu mismo...mejorate saludos
Lo importante es que tu Maite (que miente hasta en el nombre) queda retratada por su hipocresía. Y tú por simpatía.
El silencio es hermoso cuando no es impuesto.
Qué pena me das qué pena me das no respetas ni a las víctimas del terrorismo das pena simplemente pena
Indultada una mujer que mató a un hombre que pagó por tener sexo con ella cuando era adolescente
El gobernador de Tennessee, Bill Haslam, consideró que la pena de cadena perpetua para Cyntoia Brown, de 30 años, era "demasiado dura".
Durante el juicio, Brown testificó que aquel hombre le había explicado que algunas mujeres "nacían putas" y que ella era una de esas mujeres. Le dijo que nadie la querría excepto él y que lo mejor que podía hacer era aprender a ser "una buena puta".
https://elpais.com/internacional/2019/01/08/actualidad/1546949531_287185.html?rel=lom
Un saludo