El Confidencial 121103
EL FONDO DE GARANTÍA DE DEPÓSITOS, QUE LE HA COSTADO A LOS CONTRIBUYENTES 2.500 MILLONES DE EUROS, PRESUME AHORA DE BENEFICIOS
El Banco de España ha aportado casi 2.500 millones de euros al Fondo de Garantía de Depósitos (FGD) desde la creación de este último en 1980. Los contribuyentes, que han apechugado con las grandes crisis bancarias y sus saneamientos -el último de los cuales, el de Banesto, representó el 39% del total- contemplan atónitos cómo ese mismo fondo y sus `sucursales´ (entidades bancarias, cajas y cooperativas de crédito) presumen ahora de holgado patrimonio y pingües ganancias.
El año pasado, los FGD obtuvieron un beneficio de 331,7 millones de euros, de los cuales 155,3 millones correspondieron al fondo de las cajas, 135,4 al de los bancos y 41 millones al de las cooperativas. Las aportaciones públicas al reflotamiento de Banca Catalana o el Banco Urquijo son ya historia, como lo es el dinero enterrado en estas crisis, del que nunca más se supo.
El Fondo de Garantía de Depósitos de las entidades bancarias contaba al finalizar 2002 con un patrimonio acumulado de 1.446,5 millones de euros. Desde su creación, el volumen de aportaciones de los bancos ha sido de 5.472 millones, de los que se han destinado 2.959 millones de euros a saneamientos.
La crisis financiera de Banesto fue la que más esfuerzo le supuso al FGD, con un coste de 1.167,9 millones de euros -el 39% del total de los saneamientos realizados- frente a los 80 millones que deberán pagar a los perjudicados por Eurobank. El FGD suscribió 200.000 millones de las antiguas pesetas en la ampliación de capital de la intervención de Banesto, un esfuerzo que le ha dejado en números rojos durante varios años.
A esta crisis bancaria le sigue en coste la quiebra de Banca Catalana, que le supuso al Fondo un desembolso de 501 millones de euros. La entidad fue intervenida en 1983 y su gestión se otorgó al entonces Banco de Vizcaya. Otro caso sonado fue el del Banco Urquijo, cuyo reflotamiento costó 232,6 millones de euros. Posteriormente, este banco pasaría a manos de la familia March.
El Fondo de Garantía de Depósitos de las Cajas de Ahorros ha sido menos castigado que el de las entidades bancarias. Las cajas contaban a finales de 2002 con un patrimonio de 2.349 millones, muy superior al de los bancos debido al mayor beneficio. La mayor crisis sufrida por una caja fue la de la Caja de Ahorros de Plasencia, que costó al FGD 34,3 millones de euros.
Saludos y animo