Rankia España Rankia Argentina Rankia Brasil Rankia Chile Rankia Colombia Rankia Czechia Rankia Deutschland Rankia France Rankia Indonesia Rankia Italia Rankia Magyarország Rankia México Rankia Netherlands Rankia Perú Rankia Polska Rankia Portugal Rankia Romania Rankia Türkiye Rankia United Kingdom Rankia USA
Acceder
Blog EXANTE Broker Blog
Blog EXANTE Broker Blog
Cómo diversificar una cartera de inversión

Cómo diversificar una cartera de inversión

En tiempos de crisis, una de las formas de obtener una buena renta rentabilidad de las inversiones es diversificar, tal y como se desprende de los estudios llevados a cabo por empresas de renombre como Cambridge Associates o JPMorgan
 
Pero, ¿qué es la diversificación? Se llama diversificación al método de reducción de riesgos gracias al trabajo simultáneo en diferentes sectores de la economía. En otras palabras, tal y como lo describe la firma de asesoría de inversores estadounidense The Mather Group (TMG), la diversificación consiste en repartir el riesgo de una cartera entre diferentes clases de activos con el fin de garantizar que las inversiones no estén sobreexpuestas a un único factor de riesgo. 

Diversifique y sufra menores pérdidas. Caída máxima del S&P 500: 55,25% vs. Carteras diversificadas: 37,18% (1999-2020)

 
En particular, al comprar valores la diversificación se alcanza adquiriendo una cartera con una gran cantidad de activos diferentes (preferiblemente que sean de diferentes sectores de la economía). En caso de la caída brusca de la cotización de valores independientes o de todo un sector, los demás componentes de la cartera se mantendrán a flote y le ayudarán a minimizar las pérdidas. Por supuesto, incluso la diversificación mejor pensada no da una garantía del 100%. Por ejemplo, puede haber una crisis mundial y que los precios de casi todos los activos caigan. Pero en la mayoría de los casos la diversificación eleva considerablemente las posibilidades de conservar el capital.
 
Tomemos algunos ejemplos presentados por el gestor de activos AMG Funds. De acuerdo con los datos proporcionados por la compañía, entre el 25 de marzo de 2000 y el 9 de octubre de 2002, periodo en el que los mercados registraron importantes caídas, el S&P 500 perdió un 47,4% y tardó 49 meses en recuperarse, mientras que en el caso de las carteras diversificadas, la caída se redujo al 17,7% y estas tardaron una media de 8 meses en recuperarse. Tal y como se puede observar, las carteras diversificadas fueron capaces de amortiguar la caída mucho mejor y de recuperarse con mayor rapidez.

Si ampliamos el periodo de tiempo a entre 1999 y 2020, el S&P 500 sufrió una caída máxima del 55,25%, mientras que las carteras diversificadas cayeron un 37,18%, lo que pone de manifiesto una vez más que la diversificación puede ayudar a reducir los riesgos. 
 
Asimismo, a mayor diversificación, mayores pueden ser los beneficios. Según se desprende de un estudio realizado por el gestor de inversiones Vanguard, debido a que la mayoría de los valores obtienen un rendimiento inferior al del índice de referencia, el aumento del número de participaciones en una cartera aumenta las probabilidades de superar o igualar el índice de referencia. En particular, según la empresa, las carteras ampliamente diversificadas aumentan las probabilidades de superar el índice de referencia, reducen el error de seguimiento (la diferencia de rendimiento entre una cartera y su índice de referencia) y reducen la dispersión de los posibles resultados de rendimiento. 
 

Carteras diversificadas: Un rendimiento medio anual del 7,3% con menor volatilidad que las carteras de acciones puras

 
Imagine que lo único que posee son acciones de varias de las mayores compañías aéreas. Son muchas compañías, y la quiebra de una de ellas no lo arruinará. Pero la historia tiene no pocos ejemplos de crisis que afectaron a todo el sector aeronáutico – como es el caso del 11 de septiembre o durante los periodos de incremento del precio del combustible, algo que está sucediendo actualmente. Sin embargo, si en su cartera hay acciones no solo de este sector de transporte aéreo, sino también de compañías de transporte terrestre, entonces usted estará mucho mejor protegido. Si los pasajeros temen volar en avión o no quieren pagar de más por los billetes, buscarán otros medios para viajar, como por ejemplo, por vía terrestre. A fin de cuentas, usted siempre tiene las de ganar. 
 
Por otro lado, esta lógica no siempre funciona. En ocasiones, gracias a los problemas en el sector de transporte aéreo, las compañías de transporte terrestre aumentan sus beneficios. Pero también hay casos en los que cae la rentabilidad de todo el sector del transporte. Por ejemplo, en países con estaciones del año marcadas, esta baja en invierno y sube en verano (cuando la mayoría de la gente se va de vacaciones). También en periodos de crisis económicas mundiales el sector del transporte es de los primeros en sentirlas: la gente economiza dinero y se priva de lujosas formas de entretenimiento, como el turismo. 
 
Por esas razones los economistas recomiendan armar una cartera de acciones con compañías de los más diferentes sectores económicos, cuyo éxito esté en lo menor posible basado en la competencia mutua. 
 

Menores caídas y recuperación más rápida. El S&P 500 cayó un 47,4% entre 2000 y 2002, y las carteras diversificadas solo un 17,7%

 
El objetivo del inversor es obtener la mayor rentabilidad con el menor riesgo. La diversificación ayuda a reducir significativamente los riesgos, pero reduce la rentabilidad de su inversión. Mientras más acciones de compañías diferentes compre, mayor será la “divergencia” de mercado, e incluso el éxito de compañías independientes se extinguirá bajo el fondo general. Por eso los expertos no recomiendan hacer una cartera muy grande. 
 
A continuación diferenciamos cinco clases de valores con diferentes relaciones rentabilidad/riesgo. 
 
  • Bonos estatales de países con economía desarrollada. Estos poseen la menor rentabilidad, pero aquí los riesgos son menores.
  • Bonos corporativos. Estos son los que entrañan un mayor riesgo, pero su rentabilidad es mayor.
  • Acciones de grandes compañías, llamadas fichas azules, con capitalización mayor a 10.000 millones de dólares. Estas suponen más riesgos que la mayoría de bonos, pero más rentables.
  • Acciones de compañías medianas (Mid-cap stocks) con capitalización desde 2.000 hasta 10.000 millones de dólares. Estas suponen más riesgos que las fichas azules, pero tienen mayor rentabilidad.
  • Acciones de pequeñas compañías (Small-cap stocks) con capitalización de hasta 2.000 millones de dólares. Estos son los valores con más riesgos de la lista, pero son justo ellos los que a menudo realizan cambios momentáneos que generan grandes beneficios. Muchas compañías del Internet algunos años atrás comenzaron como pequeñas, y luego subieron rápidamente a la “cima”.

Aparte de la diversificación por grado de riesgo, también se puede diversificar por país. Los dos siguientes tipos de activos pueden formar parte de una cartera:  

  • Acciones de varios países de economía desarrollada.
  • Acciones de países de economía en desarrollo (en comparación con las economías desarrolladas aquí hay mayores riesgos, pero también mayor rentabilidad).
 

1999-2021: Las carteras diversificadas tienen un rendimiento del 7,38%


Mientras que los precios de muchos activos de riesgo sufren grandes saltos, estos tienen una tendencia positiva a largo plazo. Quien no teme a las bruscas caídas de las cotizaciones y espera pacientemente su recuperación, tarde o temprano obtendrá los beneficios. Pero para las inversiones a corto plazo, ese enfoque no sirve.

De acuerdo con los datos de AMG Funds, entre 1999 y 2021, las carteras diversificadas disfrutaron de un rendimiento del 7,38% frente al 8,09% de las inversiones en empresas de gran capitalización. Sin embargo, a pesar de que el rendimiento es ligeramente inferior en el caso de las carteras diversificadas, su desviación con respecto al mercado también es menor (9,16% vs. 14,94%), lo que significa que los rendimientos son más estables, ya que las desviaciones típicas más bajas suelen estar asociadas a activos más estables.

No obstante, las carteras diversificadas siguen prevaleciendo en lo que al largo plazo respecta. Según el informe de investigación "La frontera del 15%" publicado por Cambridge Associates, de media, los inversores con más del 15% en inversiones privadas obtuvieron sistemáticamente los mejores resultados a largo plazo. De hecho, si esos inversores con carteras muy diversificadas hubieran abandonado ese enfoque durante el mercado alcista de los años 90, habrían obtenido menores rendimientos a largo plazo y tendrían carteras más pequeñas en la actualidad como resultado. 

Teniendo en cuenta todo lo anterior, no hay que tomar todos los consejos como fórmulas para el éxito. Cada persona tiene sus conocimientos y experiencias específicos. A fin de cuentas, vale la pena aprender a armar una cartera por sus propias fuerzas. En este caso ayudarán las experiencias profesionales en el trabajo que se tenga. Por ejemplo, los empleados de banco saben qué banco se encuentra en buen estado y cuál no; los del área petrolera saben muchas cosas interesantes sobre sus compañías, etc. 

De acuerdo con JPMorgan, durante los últimos 10 años, una cartera bien diversificada de acciones y bonos rindió una media del 7,3% anual con menor volatilidad que una cartera de acciones pura, lo que pone de manifiesto los beneficios de la diversificación. 
Lecturas relacionadas
Informes de seguimiento de los principales fondos de inversión de Renta 4 Gestora, a cierre de noviembre de 2023
Informes de seguimiento de los principales fondos de inversión de Renta 4 Gestora, a cierre de noviembre de 2023
Indexa Capital Opiniones: Análisis y Rentabilidad (2024)
Indexa Capital Opiniones: Análisis y Rentabilidad (2024)
Invirtiendo con  Lyn  Alden
Invirtiendo con Lyn Alden
Accede a Rankia
¡Sé el primero en comentar!