Cuando eramos pequeñitos nos preguntaban qué queriamos ser de mayor. Si lo que queremos es que las personas que queremos lleguen a ser "algo" y con ese algo no me refiero a que sean ricos, guapos y famosos, sino que en cualquiera de los ámbitos en los que vive, sea una persona reconocida y respetada.
Para conseguirlo se necesita algo importantísimo e imprescindible en la vida de cualquier persona, tanto a nivel personal como a nivel profesional, me estoy refiriendo a la INTEGRIDAD.
El diccionario de la Real Academia define integridad como: "Cualidad de íntegro" ; e íntegro significa: "Dicho de una persona: Recta, proba, intachable".
Es una verdadera pena que la integridad esté hoy en día tan degradada, y me voy a referir en este post solamente al mundo profesional, en especial al de los seguros, ya que de eso trata mi blog de Rankia.
La moralidad y demás patrones empresariales se desmoronan en base al hambre de producción a cualquier precio.
Por eso y desde la modestia de este post invito a todos los profesionales de la mediación y a cualquier persona que lo lea a que se lleve bien con nuestra amiga, difícil y complicada de mantener, LA INTEGRIDAD.
Al formar parte de nosotros nos daremos cuenta que este mundo nos distinguiremos por lo que somos, no por lo que hacemos. Lo que la gente piensa que somos es la imagen que tienen de nosotros, pero Integridad es lo que en realidad somos.
Las murallas que rodean la integridad cada día son atacadas, algunas veces porque la integridad de la persona está por los suelos y otras porque se está pasando una mala racha que hace insostenible el derribo de la muralla. Estas últimas son situaciones complicadas que hay que estar en la piel del protagonista para demostrar si somos infranqueables o no.
En nuestra profesión se nos lanzan "proyectiles" bastante a menudo, y nuestra obligación es sortearlos con nuestra integridad.
Normalmente, cuando se logra franquear, suele ser por motivos económicos o por conseguir objetivos al precio que sea.
Tipos de "proyectiles" en nuestra mediación:
1-Hola, tengo 19 años y 1 año de carnet y quiero asegurar un coche.El coche (un Honda Civic 2009 con 200 H.P.), está a nombre de mi padre (de 64 años) para que pueda hacer el seguro a nombre suyo y así salirme más barato. ¿Cómo que no puedo hacerlo a nombre de mi padre? ¡pero si en todo los sitios lo hacen!
2-Asegurando el hogar: tengo de contenido 50.000 €, pero pon 25.000 que así me sale más barato y es muy difícil que se "pierda" todo.
3-La típica compañía con afán de coger todo el mercado: Pasamé la cartera de tu compañía principal (con la que llevo 18 años y buenas relaciones) y te pago más comisiones y encima tienes una extracomisión de un 10% si me pasas toda la cartera.
4-Las entidades bancarias que tienes que hacer seguros como sea y utiliza los datos de sus clientes ilegalmente
5-El mismo perro con distinto collar, o lo que es lo mismo compañías con el mismo nombre y con diferentes primas según tipo de mediador o bien sea por telefonito.
6- Etc... Etc... Etc...
Podría seguir con muchas más, como bien sabeis los profesionales.
Y esto es lo que más me gusta de mi profesión, que a pesar de que recibimos palos por todos lados, salimos adelante con honestidad.
Tragar con los "proyectiles" que he mencionado más arriba, rompería nuestraINTEGRIDAD y en una profesión tan seria como esta no nos lo podemos permitir, y menos nuestros asegurados.
Ahí queda eso....