Cuando hablamos de opciones, observareis que siempre solemos destacar la inmensa flexibilidad a la hora de plantear estrategias que nos ofrecen. Cuando empezamos, al menos así me ocurrió a mí, empiezas a reflexionar y te planteas estrategias con costes mínimos o casi gratuitos que se pueden realizar.
Estoy hablando de los ratios. En este tipo de estrategias, se compra una opción más ATM y se venden tantas como sean necesarias más OTM para financiarla. El planteamiento tiene su lógica. Si ponemos el strike lo suficientemente OTM, donde la posibilidad de que el precio llegue es mínima, estaremos operando en el mercado de forma prácticamente gratuita, y muchas veces ganaremos.
Lo que NO vemos, y es donde radica realmente el PELIGRO, es que aunque pongamos el strike muy OTM, y las probabilidades sean mínimas de que el precio llegue a tocarlo, tarde o temprano, el precio nos dará un susto, y cuando llegue ese momento, corremos un serio peligro de acabar con nuestra cuenta o hacerle un daño muy gordo.
Los problemas fundamentales son dos:
Por una parte, el riesgo en el lado donde tenemos las opciones vendidas que financian la comprada es ilimitado. Esto es un serio problema, sobretodo, si el movimiento se produce en el lado bajista porque si el mercado entra en pánico, la liquidez brillará por su ausencia, y no podremos cubrir nuestra posición, o bien, tendremos que pagar precios astronómicos para poderlo hacer.
Por otra parte, si vendemos opciones OTM para financiar las ATM, estaremos apalancándonos siempre, y esto es como con los neumáticos, el apalancamiento sin control no sirve de nada. Cuando pretendemos vender opciones más OTM para que el precio tenga más dificultades en tocarlo, tendremos que vender más opciones para sufragar la opción ATM, y esto significa mayor apalancamiento. Por tanto, incurrimos en más riesgo y mayores pérdidas potenciales y más rápidas si el precio se nos va del rango donde hacemos beneficio.
Por tanto, antes de realizar este tipo de estrategias, debemos ser conscientes de los riesgos que asumimos. Puede parecer que el precio nunca vaya a llegar a determinados strikes, pero si lo hace, ¿tenemos claro el daño que nos puede hacer?
No es que no podamos utilizar este tipo de estrategias, pero seguramente haya otras opciones, con un riesgo más controlado y limitado, que se adapten igualmente a nuestras necesidades, y que nos permitan dormir tranquilos sin pensar si el mercado pueda caerse de repente o irse a las nubes y dinamitar nuestra cuenta.
Veremos un ejemplo de este tipo de estrategias la semana que viene.
Salu2 y feliz semana!
F.C.Moltó
Trading EV+
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