Seguro de hogar para inquilinos, ¿Cómo protegerte?

 Cuando arriendas una casa o piso, eres el único encargado de ese inmueble. Todo lo que ocurra a partir de que lo habites correrá por tu cuenta, por lo que, debes hacerte responsable de mantenerlo en buen estado. Algunas personas, considerando que en ocasiones ocurren imprevistos, contratan un seguro de hogar para inquilinos, pero ¿en qué consiste? Es un producto que no todos conocen, pero que es muy útil. 

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Un seguro de hogar para inquilinos ofrece varios servicios con los cuales alguien, que vive en una casa de alquiler, puede estar tranquilo. En casos en los que ocurran daños al inmueble, y que el inquilino deba cubrir, este tipo de seguro le da el respaldo económico que necesita. Según la empresa aseguradora, este producto ofrece ciertos tipos de cobertura que veremos a continuación.

El seguro mencionado es pagado por el inquilino. Si existe un seguro de hogar o un seguro de impago de alquiler, son pagados por el propietario de la vivienda. No obstante, es importante mencionar que el seguro de hogar para inquilinos no es obligatorio para poder alquilar una casa o piso, pero es muy recomendable. Sobre todo si alquilas una vivienda que no está en óptimas condiciones. 

Tampoco es necesario que tu casero sepa o participe de esta contratación. No debe generar una autorización o permiso verbal para que puedas hacer uso de una herramienta como esta. Todo lo que necesitas es cumplir con ciertos requisitos y mantener al día tus pagos, tanto del alquiler como del seguro. Ahora, conoce un poco más sobre este seguro para saber si es justo lo que necesitas.

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Las coberturas más comunes en todo seguro de hogar para inquilinos son: responsabilidad civil, robo en la vivienda, asistencia en el hogar, daños eléctricos y daños por agua, daños o robo fuera del hogar e incendios. Un ejemplo de cobertura de responsabilidad civil, siendo una de las más importantes, es aquel daño que, desde la vivienda, se ocasione a un tercero, como una filtración que perjudique el piso de abajo.

Como hemos dicho, cada aseguradora tiene planes de coberturas diferentes y eso significa que incluyen más o menos casos de riesgos. Por ejemplo, algunas tienen coberturas en cuanto a lo legal, por aquellos problemas que los inquilinos pueden experimentar con su casero. Entonces, el seguro incluye asesoramiento legal, informático, reparaciones estéticas de bienes, cobertura para joyas y otros.

Este tipo de seguros cubre los daños al contenido de la vivienda, pero no a la estructura como tal. En ese caso, lo que necesitas es un seguro de hogar, pero es un producto que está diseñado para dueños de inmuebles. Como arrendatario tienes derecho a contratar un seguro que te ayude con tus responsabilidades propias de alguien que vive en una casa o piso de alquiler. 

 

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Como en todos los seguros, debes estar atento a las consideraciones que propone la compañía. Por ejemplo, si el monto de la indemnización de verdad puede ser suficiente ante un problema con terceros. También, es importante saber la cuantía para reparaciones de los bienes dañados. Por otra parte, saber la cantidad máxima para cubrir daños muy comunes como por ejemplo agua o electricidad. 

Debes saber que la compañía está obligada a pagar tus gastos de hotel de ser necesario ante un siniestro. De seleccionar una empresa y que no ofrezca este tipo de aspectos, lo mejor será seguir buscando opciones. También debes tener muy claro el número de veces que puedes usar tu seguro para reparar tu hogar; esto tendrá mucho que ver con el coste de la póliza. 

Si sabes cómo funcionan las aseguradoras, entenderás que estas empresas pueden negarse a ofrecerte una póliza. Algunos casos en los que no puedes contratar un seguro de hogar para inquilinos son: que la vivienda no tenga documentación legal, que se trate de un alquiler compartido o sea un alquiler turístico o temporal (menos de un año). Por último, si no tienes un contrato de alquiler por escrito.

En caso de querer saber los requisitos básicos para contratar un seguro de hogar para inquilinos están relacionados con el punto anterior; tener un contrato de arrendamiento por un año o más, que dicho contrato este a tu nombre y que no sea un hotel o alojamiento por habitación. Claro está, debes tener al día tu documentación personal y poder pagar el seguro cada vez que corresponda. 

En caso de desahucio, el seguro de hogar para inquilinos te ayudará con asesoramiento jurídico extrajudicial y en la defensa y reclamación frente al casero. Además del traslado legal obligatorio, incluyendo la mudanza, en tanto no sea por impago. De esta manera podrás sentir un apoyo de la aseguradora si experimentas una situación de desahucio inesperada.