Siempre e inevitablemente cada uno de nosotros subestima el número de individuos estúpidos que circula por el mundo. Primera ley fundamental de la estupidez humana Carlo Maria Cipolla Llevo más de un año sin postear y no sé por dónde empezar… Empecé un artículo muy extenso en el que hablaba de macroeconomía, geopolítica, fascismo y nuevas tecnologías.
Tengo que reconocer que últimamente no sigo demasiado la evolución de los índices macroeconómicos porque ahora tengo el foco puesto en la preocupante evolución de los conflictos geopolíticos que se extienden por todo el globo. Me gustaría centrarme en un solo campo, pero no puedo. Después de todo, soy historiador
Hubo una época dorada, no hace tanto, en el que las grandes corporaciones luchaban a cara de perro por su cuota de mercado. No es que los políticos de entonces fueran mejores o peores que los actuales, pero había cierto laissez faire en los asuntos de la economía. Y sobre todo, los banqueros centrales no iban de superestrellas ni sus acciones tenían la repercusión mediática de ahora.
Bueno, si en el anterior artículo me metí con la casta neoliberal que nos gobierna entre bambalinas… En éste, ¡seguiré haciéndolo! No es para menos, pues se merecen eso y mucho más. Aunque no creo que llegue a la colección de insultos, desprecios e improperios que Max Keiser les dedica en todos sus programas.
El asunto de si Estados Unidos está creciendo o no es muy complejo. No lo tengo nada claro; y sí lo hace, habría que saber “¿por qué?”. De todos modos, lo que sí sabemos es que el resto del mundo crece muy poco y que Europa no crece nada.
Tal como yo lo veo, estamos experimentando el segundo o el tercer embate de una monumental recesión cuyo final no se vislumbra al final del túnel. Siento ser tan pesimista, pero es que tengo la sensación de que estamos inmersos en una espiral económica descendente que nos supera y de la que nos va a costar mucho salir.
En cierto modo el concepto del “Peak Oil” es una entelequia. Lo es porque todavía queda mucho oro negro en el subsuelo. El problema es que su extracción se encarece a un ritmo vertiginoso a medida que disminuye la presión en la roca madre que lo contiene.
Siempre he pensado que la geopolítica es la contraparte de la economía. Tomar el pulso de las relaciones internacionales, evaluar las tensiones regionales, juzgar los hechos y voilà: sabréis como están las cosas de verdad. No es un ejercicio automático, aunque ayuda mucho. Por sus frutos los conoceréis dijo un carpintero hace 2000 años...
Por tanto, yo te aconsejo que de mí compres oro refinado en fuego, para que seas rico, y vestiduras blancas para vestirte, y que no se descubra la vergüenza de tu desnudez; y unge tus ojos con colirio, para que veas.
Desde 1850 a 1914 se desarrolló en Inglaterra, en Estados Unidos y en otras naciones europeas, lo que los historiadores han dado en llamar II Revolución Industrial. Una periodo espectacular, en cuánto al desarrollo económico y material de la humanidad
Decía Mark Twain que “la historia no se repite, pero rima”; pues periódicamente se producen eventos políticos, económicos o sociales cuyo desarrollo, por su similitud, nos recuerdan a otros sucesos del pasado. Esta percepción del paso del tiempo conlleva en sí misma, una promesa: podemos aprender de los errores de nuestros antepasados.