Estos meses todo el mundo está hablando de Bitcoin, y si falta alguien sólo hay que esperar a la cena de Nochebuena para que en todas las sobremesas se escuche algo parecido a “ey, cuñao que me he comprado unos bitcoins y no veas la pasta que estoy ganando”.
Entonces habrá llegado el momento de la verdad. El momento crítico que marcará un futuro muy, pero que muy interesante.
Sobre los bitcoins y las criptodivisas ya escribí a principios del 2013, explicando la idea central del sistema electrónico de efectivo a través de una red p2p. Y su funcionamiento centrado en la solución al famoso “problema de los generales Bizantinos”. Te recomiendo leer el artículo que me publicó mi amigo Alberto en su web x-trader.net.
Lo que no hice en aquel entonces fue comprar unos cuantos bitcoins al ridículo precio de 185$ al que estaban cotizando.
Para matarme ¿verdad?
Bueno, realmente no me preocupa porque, si lo pienso bien y siendo honesto conmigo mismo, seguramente un par de años después cuando mis 2 o 3 bitcoins estuviesen cotizando al doble de ese precio, los hubiese vendido para comprarme una moto o algo así y entonces... Entonces hoy sí que estaría dándome cabezazos contra un muro (o lanzándome con la moto por un barranco).
C'est la vie.
Pero, volvamos al presente, Bitcoin superó el mes pasado la barrera de los 10,000$ y estamos viendo como cada día se aprecia a un ritmo alucinante.
Nada sorprendente, sabiendo que el precio objetivo final será de 1,000,000$. Sí, no me he vuelto loco, un millón de dólares. Lo pienso, y no, no soy el único como veréis en unos instantes.
Bitcoin no es una burbuja tulipánica
Mucha gente argumenta contra el bitcoin, pero pienso que se equivocan:
Los alumnos de mi Escuela de Trading me venían preguntando desde hace tiempo mi opinión sobre el fenómeno Bitcoin ¿es una burbuja? ¿una gigantesca estafa piramidal?
Veamos... La tasa de inflación del USD es aproximadamente del 2% anual. La tasa de deflación del Bitcoin es del 50% cada 4 años (está programado así, en la tasa de recompensas obtenidas por cada bloque minado). Así que evidentemente ¡El dinero fiat es la burbuja y Bitcoin ha llegado para hacerla estallar!
La invención de las criptodivisas, implica necesariamente la mayor revolución económica de la historia de la Humanidad. Y no tengo pensado perdérmela, tampoco tengo la bola de cristal para predecir el futuro, así que no sé dónde acabará esto.
Pero lo que sí sé es que en cualquier escenario el viajecito que nos vamos a pegar va a merecer la pena. Y que el futuro, como ya he dicho, va a ser realmente interesante.
Así que… ¡apriétense los cinturones porque, en este artículo, nos subimos a la montaña rusa de la volatilidad bitconiana! ¡vamos a tope!
La criptodivisa del millón de dólares
Bitcoin llegará a un millón, no lo digo yo, lo dice John McAfee, el legendario fundador de la compañía de antivirus que lleva su nombre. Famoso por su alucinante trayectoria vital que incluye, entre otras locuras, el arresto por tráfico de drogas y posesión de armamento ilegal. Todo un crack.
La última aventura de McAfee es MGT Capital Investments una compañía minera de bitcoins. Han conseguido llegar al top five de las mineras de bitcoins de los EEUU.
Así se entiende que el bueno de John diga que Bitcoin llegará a un millón de dólares, tiene que vender su producto, porque a John le va el pellejo en ello… literalmente.
Digo literalmente porque hace poco publicó un tweet en el que anunciaba que si Bitcoin no llegaba a 1 millón de dólares a finales del 2020 se cortaría y se comería su propia picha.
No tengo palabras para definir a John. He is the man, really.
El problema del depósito de valor y el medio de cambio
La trayectoria hacia el millón de dólares es lo que lo está convirtiendo en un gigantesco depósito de valor, ésto hace pensar a muchos que nunca será utilizado como medio de cambio puesto que, si por ejemplo hoy puedes comprar una mansión en una isla tropical por unos pocos cientos de bitcoin, en un par de años podrás comprarte la mansión y la isla entera si quieres.
Así que ¿quién sería tan estúpido de gastar ahora sus bitcoins?
Supuestamente es ésto lo que nos lleva a la imposibilidad del uso de Bitcoin como medio de cambio. Y de ahí la lógica de la burbuja tulipánica que augura que tiene que tocar techo, explotar y destruir con ella los ahorros de todos nosotros, frikis flipados que apostamos por las criptodivisas.
O eso quisieran los que no van a comprar un billete al futuro.
Claramente no, la respuesta a este dilema de la no viabilidad como medio de cambio reside en entender cómo funcionan las curvas de adopción tecnológicas y los valores de uso de las redes. Recordemos que estamos hablando de una red p2p.
Pondré un ejemplo claro con un bicho tecnológico bien conocido por todos: facebook.
En el siguiente gráfico tenemos la conocida curva de adopción-difusión de la innovación de Rogers. La línea azul representa el crecimiento en número de usuarios de una determinada tecnología, siendo la amarilla el número de usuarios acumulado.
Veamos paso a paso qué sucede conforme van entrando los usuarios. Llamaremos al 2.5% inicial “innovadores”, el 13.5% siguiente “adoptadores tempranos” y el 34% restante hasta completar la mitad de la población como “mayoría temprana”. El 50% siguiente lo formarán la “mayoría tardía” y los “retrasados”. Sí, me gusta el nombre de retrasado.
Al principio, a un usuario nuevo le aporta muy poco adoptar la nueva tecnología. ¿Qué pensaba la gente hace unos años cuando recibieron un email de un desconocido Zuckerberg, invitándoles a participar de su friki-red de colegas informáticos? Seguramente dijeron: “buah, buscaos una vida, nerdos”.
Pero poco a poco, con la entrada de los “adoptadores tempranos” la red fue creciendo y acumulando valor, puesto que ahora ya no sólo podías ver las fotos del dormitorio universitario de Mark y sus colegas, también podías ver las fotos de la mitad de las chicas del campus… incluída esa rubia simpática que siempre te sonreía en la cafetería del aulario… Y la cosa empezaba ya a ponerse interesante ¿verdad?
Hasta aquí hemos recorrido (no sin dificultades) el primer 50% de adopción y difusión de la tecnología.
¿Qué está pasando? El libro de caras se está revalorizando y para los que están fuera ésto actúa como un imán cada vez más potente.
El valor aumenta, aumenta, aumenta…
Todo el mundo quiere ahora entrar en la red, y nos acercamos a la segunda parte de la curva de adopción-difusión donde hasta tu abuelita se ha abierto ya una cuenta de facebook y te está comentando en esas fotos que tienes del viaje por Malasia, si te llevaste el paraguas o no y haciendo “me gusta” en todas las fotos de platos de insectos que no te comiste, pero que están ahí para fardar de aventurero.
Y la red sigue aumentando de valor...
Pero llega un momento en el que un nuevo usuario ya no aporta tanto como antes, en facebook hay hoy aproximadamente mil millones de usuarios activos. La llegada de unos cuantos miles de usuarios más ya no va a afectar significativamente al valor de la red. Estamos en la etapa final, cuando entran los rezagados y usuarios finales.
Éste es el momento en el que el valor creciente de una red se estabiliza y deja de aumentar.
Y ahí tenemos cuando Bitcoin, una red de dinero p2p que sigue el modelo de adopción-difusión se revalorizará hasta su máximo natural, haciendo enormemente ricos a los innovadores y adoptadores tempranos, incluso a las mayorías tempranas y tardías… pero nunca a los retrasados puesto que estos ya entran con el valor objetivo prácticamente alcanzado y estabilizado.
Entonces, Bitcoin habrá alcanzado su máxima capacidad como depósito de valor y empezará a actuar con su segunda faceta de medio de cambio. Convirtiéndose así en el mejor dinero que la Humanidad haya creado nunca y desbancando sin piedad, como hacen todas las tecnologías superiores con sus antecesoras, al dinero fiat. De una vez y por siempre.
Buy and Hodl
En este momento nos encontramos, seguramente, en el inicio de la fase adopción por la mayoría temprana. Aquí empieza la verdadera difusión de la tecnología, cuando todo el mundo empieza a hablar de ella (acuérdate de mí cuando escuches a tu cuñado en Nochebuena).
Y no está exento de riesgos, puesto que aquí se encuentra el temido “abismo” de la curva. Esa curva en la que muchas tecnologías prometedoras te miran con ojos desencajados y te dicen con voz espectral: “en esa curva me maté yo”.
Es el momento crítico en el que se decide si salimos de la órbita terrestre en dirección a la Luna o nos pegamos el morrazo del siglo.
Invertir en Bitcoin es una cuestión con muchas más dimensiones que la meramente económica. ¿No te resulta interesante patearle la cara al sistema económico mundial y su colosal estafa piramidal llamada dinero fiat? A mi sí, me dan hasta escalofríos de pensarlo (por no decir algo más vulgar y a la altura de John McAfee).
No doy consejos financieros, cada cuál que decida cómo hacer sus inversiones. Pero lo que sí puedo decir es lo que yo hago, sin que ésto suponga una recomendación de ningún tipo:
Buy and Hodl.
Hodl, ¿no querrás decir hold? ;-) Nah, si no me entiendes ya lo harás cuando compres tus primeros bitcoins...
Actúa ahora, no te quedes retrasado
Lo que estamos viviendo es, en definitiva, un monumental traspaso del valor del dinero a las criptodivisas. Pienso que en los próximos 3-5 años veremos el colapso y desmoronamiento del sistema monetario global, basado en dinero fiat.
Estamos justamente en ese momento extraño, el punto sin retorno, la última llamada para todos los que están atentos. El momento de afrontar esta realidad y capitalizarla al máximo es ahora.
Y por ello, en la Escuela de Trading Inteligente hemos tomado acción y estamos enseñando cómo hacerlo a todos nuestros alumnos con el mejor curso posible de Bitcoin y Criptodivisas que hemos podido crear.
Si quieres saber más te recomiendo echar un vistazo al contenido de mi curso.
Conclusiones
Bitcoin sigue la curva de adopción y difusión tecnológica, aportando toneladas de valor a los que lo han comprendido y están sabiendo aprovechar el momento.
En este artículo he querido darte mi enfoque particular, y como ves me posiciono claramente a favor de las criptodivisas y su éxito irremediable.
Sin embargo, ya he dicho que no poseo la bola de cristal y podría estar equivocado.
Tal vez pierda todo el capital que he ido invirtiendo en cripto y mucha gente me venga con aquello del “te lo dije…”.
Pero, pensándolo bien, si el bitcoin no llega nunca a un millón de dólares como creo, al menos veremos al bueno de John merendándose su hombría en un canal de noticias internacional…
¿Lo ves? Te dije que el futuro iba a ser interesante ;-)