Aspirinas para una neumonía

De lo visto la semana pasada queda poquita cosa por añadir. Sigo pensando que la asunción pública de las pérdidas de aquellos que otrora se forraron pornográficamente a base de actuar de forma negligente y temeraria resulta a estas alturas injusta, inmoral, ineficiente e inútil. Las medias tomadas el pasado jueves las conocemos todos: inyección de más pasta (o lo que es lo mismo, compra de títulos mierdosos), prohibición de posiciones bajistas (¡¡viva el libre mercado¡¡) y absorción de activos tóxicos (especialmente repugnante se me antoja el montar una especie de agencia estatal para absorber todos los activos tóxicos que pululan por ahí). En todo caso las medidas anunciadas son meros parches que incluso pueden resultar inviables de llevar a cabo por su gran impacto monetario y que en todo caso no atajarán una crisis que sigue socavando con fuerza los cimientos de la economía mundial. Mientras por España, la situación va de mal en peor, por ejemplo hoy se ha sabido que en agosto se incrementó la morosidad al 11% (a saber cuanta hay de no-declarada por los bancos y cajas) y ello cuando la situación de liquidez sigue agravándose, tres ejemplos: el Euribordiario se ha disparado hoy al 5.44%, el BCE anuncia nuevas subastas extraordinarias y la CAM ya está dispuesto a soltar el 7.50% TAE para captar pasivo. Alguien da más?. BANCAJA quizás.