Si bien hoy en día todavía es posible encontrarse con iluminados que sostienen que lo de que bajen los pisos es un imposible y que como mucho se mantendrán, que el gobierno no lo permitirá, que la gente nos los venderá por menos que lo que les costó y blah, blah, blah, todos ellos acabarán, quieran o no, más pronto o más tarde, por darse de bruces con la realidad más amarga, y que no es otra, que el sector inmobiliario se está derrumbando. Las noticias que constantemente van saliendo confirmando la crisis del sector se multiplican. El último de estos informes es el del portal inmobiliario Facilísimo.com hecho público hoy: "Descenso generalizado en los precios de los pisos de segunda mano en Enero", con descensos tan signiticativos como el de Barcelona, un 1.27% que representa más de un 15% anual. Hay otros estudios como el de Fotocasa que fijan un descenso mensual de aprox. un punto porcentual sólo en Catalunya. Si bien, como toda estadística de precios en el sector inmobiliario hay que tomársela con cierta prudencia en su interpretación, es obvio que marca una tendencia, ya no de tan sólo de contención de precios, sino de descenso generalizado de los mismos. Vaya, que todo pinta que la temporada de rebajas en el sector del tocho no acabará en febrero como ocurre en el comercio, esto tiene cuerda para rato, y cabe recordar, que en toda temporada de rebajas al uso hay varias fases: rebaja inicial, segundas y terceras rebajas, liquidación de stocks y liquidación por cierre definitivo. En este Armagedón inmobiliario en que estamos inmersos, seremos testigos de todas ellas, tiempo al tiempo.