Gran Bretaña dijo “Sí” al Brexit y los mercados financieros palidecieron ante un resultado no esperado. El jueves 23 de junio el 52% de los británicos afirmaba querer salir de la Unión Europea y al día siguiente las principales bolsas europeas amanecían tratando de digerir la noticia con unas caídas tales que los titulares poco tardaron en tildarlo de “viernes negro”. No en vano, el Ibex-35 perdía un 12,3%, la mayor caída de su historia, y el resto de mercados europeos retrocedían fuertemente (entre el 3,15% del londinense Footsie 100 y el 12,48% el selectivo italiano).
La industria de la inversión colectiva en España se vio fuertemente afectada por este escenario, lo que ha provocado que en junio el volumen total gestionado haya retrocedido un 1,6% (3,64 mil millones de euros), hasta los 219,28 mil millones de euros. Si en mayo había logrado remontar todo lo perdido en los primeros meses del año, el acumulado anual se vuelve a tornar negativo.
El mercado de fondos cierra el primer semestre del año con una caída de 2,94 mil millones de euros (-1,3%). Este retroceso vuelve a impedir que el patrimonio total bajo gestión levante el vuelo. Por el contrario, desde marzo del año pasado se encuentra encallado en un rango entre los 215 y los 225 mil millones de euros del que no logra escapar.
El comportamiento patrimonial por categorías, sin embargo, se encuentra fuertemente polarizado, con un incremento semestral de 5,13 mil millones de euros en los fondos de renta fija y caídas de 8,72 mil millones en aquellos con algún componente de riesgo.
Datos patrimoniales
La caída del sector en junio ha venido determinada por las primeras reacciones del mercado al Brexit. De esta forma, el 65% del retroceso se debe a las pérdidas de los activos que los fondos tienen en cartera y sólo un 35% (1,28 mil millones de euros) a los reembolsos de los partícipes.
Estas caídas no se reparten de forma homogénea. La decisión de los británicos ha afectado con mayor énfasis a los activos de renta variable, que sufren caídas en el mes de 2,13 mil millones de euros, frente a los 220 millones de euros perdidos por los fondos de renta fija, gracias a que los activos de renta fija cuentan con el soporte del programa de compras del BCE.
En el acumulado anual estas cifras se extreman aún más. Mientras los partícipes han suscrito en términos netos 60 millones de euros durante 2016, la industria pierde 2,94 mil millones de euros en términos brutos, es decir, recogiendo las caídas de los mercados bursátiles.