Siempre hemos valorado, que con dinero todo se compra, salvo la amistad y poco más. La típica frase de tanto tienes tanto vales, ¿es todavía utilizable en momentos de crisis?.
Los inmuebles hasta ahora denotaban una categoría de terrateniente, de persona poderosa, ahora dada la liquidez de los mismos, se puede considerar un lastre.
Estamos en momentos en los que los valores, el trabajo en equipo, el compañerismo, han tomado peso en la sociedad, dejando atrás los valores de trepa, tiburón, etc.
Luego la mítica frase de tanto tienes, tanto vales, se deja atrás, ahora se incorpora la nueva frase de tienes trabajo, tanto vales. El tener ingresos recurrentes, deja atrás el patrimonio más importante. Ya que hay que mantenerlo y es costoso, por lo tanto hace falta liquidez, que no se obtiene con la venta de inmuebles, ya que poco se vende y lo que se vende es muy tirado de precio, povoca el dejar atrás esa frase.
Todo cambia, los hábitos de consumo, las necesidades primarias de la gente, los principios(se va a por valores más llanos), los objetivos, las prioridades.
El primero que se conciencie del cambio, es el que se llevará el gato al agua, el que se adapte con más rapidez tomará la senda de la felicidad anticipadamente.
Queda pues la eterna pregunta de tanto tienes, tanto vales...... y solo es aplicable en momentos de crisis en el corazón. A mas corazón, mayor valor como persona.