• Pepu Hernández: “El éxito nunca puede ser un fin, sino una consecuencia.”

La pronunció tras ganar el Mundial de ba-lon-ces-to de 2006. Sería aplicable a cualquier situación y entorno profesional. En el caso del trading, el fin no debería ser ganar dinero, sino que ganar dinero debería ser la consecuencia de hacer bien el trabajo y plantear y ejecutar buenas operaciones.

• Johan Cruyff: “Jugar bien consiste en ejecutar correctamente todos los movimientos.”

Cerrar una buena operación consiste en haber ejecutado correctamente los elementos del plan de trading. El dinero que se gana de forma improvisada, entrando al tuntún al mercado, haciendo trading emocional y sin poder fundamentar de alguna manera objetivable las operaciones, nunca dura mucho tiempo.

• Jorge Valdano: “Nadie gana por jugar mal, sino a pesar de jugar mal.”

A veces se puede ganar dinero planteando mal las operaciones, pero ese dinero es breve y suele acabar en pérdidas abultadas. Se trata de plantear buenas operaciones y buscar un método propio que nos indique cuándo abrir y cerrar una posición y cómo gestionarla.

• Pacho Maturana: “Si juego bien y gano, es normal; si juego bien y pierdo, por lo menos obtuve un triunfo con el buen juego. En cambio, si juego mal y además pierdo, sufro doble derrota.”

Lo mismo en el trading. Una operación bien fundamentada suele producir ganancias. Si no produce ganancias, se habrá hecho bien el trabajo, se habrá tenido controlado el nivel de riesgo, y se habrá procedido a leer el mensaje del mercado. Si uno plantea mal la operación, lo más probable es que pierda. Se empieza a perder dinero desde el momento en que no se hace bien el trabajo de análisis previo.

• César Luis Menotti: “El problema no es por qué echan a los entrenadores, el problema es que no saben para qué los fichan.”

Si uno abre una operación debería tener claras las razones por las que la ha abierto, y si pierde debería saber por qué ha perdido y tratar de aprender de ello.

• Bill Shankly: “Si estás en el área de penalti y no estás seguro de qué hacer con el balón, mételo en la portería y después discutiremos las opciones.”

Plantea bien la operación antes de entrar al mercado, una vez dentro no es momento para dudas. O el precio alcanza el objetivo marcado o salta el stop; no hay más.

• Paul Ince: “Ottavio Bianchi me dijo: si no interceptas al balón, intercepta al rival. Tan simple como eso.”

Si no ganas en la operación, corta rápidamente las pérdidas. Así de sencillo.

• Miguel Indurain: “No hay que tener miedo a perder; de hecho, he perdido muchas más carreras de las que he ganado.”

Un grande. Seguramente una de las mejores y más originales definiciones que se pueda leer de la esperanza matemática positiva. No hace falta ni comentarlo. Las pérdidas hay que mantenerlas pequeñas y controladas. Se puede perder en 100 carreras sin ninguna repercusión, si luego se ganan 5 Tours y 2 Giros.

• Jorge Valdano: “Cuanto más maduro es un plantel futbolístico, más honesto será en sus juicios, porque entenderá que sobre el reconocimiento de los errores se sentará el secreto de futuras soluciones.”

Hay que admitir la responsabilidad que uno tiene en las pérdidas e ir corrigiendo los errores a la hora de operar. No se debe echar la culpa al mercado, al broker, a internet o a la mala suerte. Hay que revisar la operación, analizar qué ha fallado y aprender para evitar que pueda suceder de nuevo en el futuro.

• José Antonio Camacho: “Para ser buen entrenador te tienen que haber echado por lo menos dos veces.”

Para ser un gran operador primero hay que aprender a perder. Las pérdidas aportan madurez y sabiduría de mercado. Cuando el operador se plantea antes el dinero que puede perder que el dinero que puede ganar, es un operador maduro con una hoja de ruta y en disposición de conseguir beneficios.

• Albert Camus: “Aprendí que la pelota nunca viene hacia uno por donde uno espera que venga. Eso me ayudó mucho en la vida, sobre todo en las grandes ciudades, donde la gente no suele ser lo que se dice derecha.”

En los mercados sucede algo parecido. Muchas veces no se sabe bien por dónde pueden salir. Uno cree que va a pasar algo y al final no pasa o incluso sucede lo contrario. No se debe abrir una posición por un sentimiento, una opinión o una corazonada, hay que remitirse a las señales operativas recogidas en el propio método. Hay que saber dejar las creencias y opiniones propias de lado; hay que diferenciar entre lo que uno cree que puede pasar y entre hacer una teoría sugestiva de ello y encastillarse en la operación o en las posiciones. Siempre hay que ser flexible, estar dispuesto a cambiar presto de opinión y seguir el movimiento del mercado.

• Johan Cruyff: “La pelota no se cansa nunca.”

Por si no ha quedado claro lo anterior, no mantengas una posición contra el mercado. Antes de tener razón, puedes haberte quedado sin capital.

• Roberto Fontanarrosa: “Mi fracaso en el fútbol obedece a dos motivos. Primero: mi pierna derecha. Segundo: mi pierna izquierda.”

Fontanarrosa, gran dibujante y escritor, hizo muy bien en no empeñarse en el fútbol, sus talentos eran otros. Si uno pierde sistemáticamente en el mercado, tendrá que averiguar por qué es así. Todo operador debería conocerse mínimamente y tener presente cuáles son sus puntos fuertes y cuáles sus carencias. Debe saber si es paciente o impaciente, si es tranquilo o nervioso, si actúa de modo impulsivo o le cuesta decidirse, y encontrar una operativa que pueda ajustarse a su personalidad. Y si se sigue perdiendo, pues tampoco hay por qué empeñarse ni desgastarse moral y económicamente. Siempre se podrá destacar en otro campo o vivir de otra cosa.