Antes de abrir la operación uno se debería fijar en algunos parámetros, como las reglas operativas que llevarían a abrirla, el control del riesgo de la misma y la ecuación rentabilidad-riesgo en base a un objetivo definido para poder cerrar esa operación.
En el futuro del
Ibex 35, en gráfico de 30 minutos, se observa lo que podría ser un
retroceso a la clavicular de una figura de hombro-cabeza-hombro, cuya pérdida pudo determinar la caída previa. Se distingue también una pauta de
estrella vespertina. En gráficos de más corto plazo se podría tener una
ruptura falsa sobre la línea marrón.
La operativa
consistiría en una operación de venta con un
stop más algo de filtro sobre los máximos de la figura. Podrían ser 8.780, o bien colocarlo por encima de la línea clavicular.
El primer objetivo de caída serían los 8.620, que equivaldría al 50% de una
Línea grande blanca, casi de cierre
marubozu. Siguientes objetivos serían el origen de la vela en 8.550 y el apoyo de la línea de base del canal.
Con venta en 8.740,
stop en 8.780 y compra en 8.620, se arriesgarían 40 puntos para conseguir 120, que sería una buena ecuación recompensa-riesgo con un ratio de 3 a 1.