Buenos días,
El viernes se cerró una semana muy importante en la que se conocieron los datos de empleo semanales. Los datos de empleo dejaron unos resultados sorprendentes, ya que el cambio de empleo ha sido realmente bajo, sin embargo la tasa de desempleo ha caído hasta el 9%. Las razones se pueden leer en el artículo del viernes. Resumiéndolo se podría deber a una bajada de la población activa o que el causante ha sido el mal tiempo que ha azotado las últimas semanas a la mayor parte del país. En definitiva, lo que deja muy claro es que la Reserva Federal no se pensará ni un segundo reducir el segundo plan de compra de activos.
Durante el fin de semana la Unión Europea no ha llegado a ningún nuevo acuerdo sobre la crisis de deuda de la eurozona. El proceso es lento como nos tiene acostumbrados los políticos europeos. Sin embargo, parece que está claro que llegarán a nuevos acuerdos ya que sólo una política monetaria conjunta no es suficiente para remar todos en la misma dirección.
Durante el mes pasado se ha estado hablando de que el Banco Central Europeo podría estar pensando en subir los tipos de interés. La semana pasada Trichet volvió a ser muy cauto llevando al euro a desinflarse desde máximos. Además, comentó que la inflación es algo momentáneo. Habrá que estar atentos a ver si no le sucede los mismo a Trichet que a su homologo inglés.
Por la mañana se conocerá la producción industrial de Alemania, que si no es positiva podría ayudar a que los mercados realicen un respiro. Además, en el Medio Oriente se mantiene la incertidumbre ya que todavía la población se mantiene en la calle. Por otro lado, los datos del viernes de empleo americano no son para ser muy optimistas y por lo tanto se debería de mantener la cautela. Finalmente, los indicadores técnicos como el MACD y Estocásticos están en clara sobrecompra.