Psicología del inversor
Un tema a tratar por cualquier persona que quiera afrontar con alguna garantía el trading es, sin duda, aquellos aspectos que pueden afectarnos cuando estamos realizando nuestro trabajo. A diferencia de las personas que no tienen los conocimientos necesarios para poder hacer las cosas con una mínima garantía, nosotros tenemos que conocer qué es posible que nos suceda en medio de la faena.
Ya se sabe eso de que “los pueblos que no conocen su historia están condenados a repetirla”. Llevado esto a nuestro campo, si nosotros no conocemos lo que le suele ocurrir al hombre desde que es hombre, pues es algo seguro que tarde o temprano nos daremos de bruces.
Esto puede ser parecido a un pobre gatito doméstico, que no ha salido nunca de los 50 metros cuadrados del piso de su dueño. Puede que nunca haya visto a un lindo pajarito. Pero lo que es seguro es que la primera vez que lo vea, se va a ir a por él sin pensárselo dos veces.
Así que te aviso. Aunque nunca has visto un pajarito, cuando lo veas es posible que pierdas la cabeza.
Te aviso de lo que nuestro instinto de hombre cabezón te va a incitar a que hagas cuando estés con una operación abierta. Hoy veremos el primero de los tres errores más comunes en lo que se suele llamar, la psicología del inversor.
1. Cambiar de un método a otro constantemente.
Este es uno de los principales problemas al que todos en algún momento nos hemos podido enfrentar. Hasta que te sitúas en un camino en el que finalmente te encuentras cómodo, por haber probado y reprobado el método que utilices, parece que lo más seguro, como todo el mundo ha tenido que hacer, es que te vuelvas un poco majara buscando tu traje a medida.
No obstante, una cosa es buscar y otra picotear. Es decir, una vez que ya hemos encontrado aquello con lo que creemos que nos encontramos cómodos, con esperanza matemática positiva etc., a la primera de cambio lo desechamos por otro más nuevo y mejor. Los métodos de trading no son teléfonos móviles los cuales tienes que estar cambiando cada 3 meses si quieres estar a la última. Es una forma de ver el mercado, la cual cada x tiempo puedes ajustar adaptándola a tus circunstancias o las del mercado. No puedes estar constantemente buscando para sustituir tu operativa principal.
Por supuesto que es realmente útil estar siempre investigando, para tener sistemas complementarios o que puedan incluso convertirse en principales algún día. Pero lo que es destructivo más de constructivo es estar cambiando constantemente el método.
¿Cuál es el gran peligro? Encontrarnos con varias series de pérdidas seguidas de todos aquellos sistemas con los que nos vayamos encontrando, entre otros. Esto que parece algo imposible es muy real. Los sistemas no tienen memoria entre si, ni tienen en cuenta tus penas. Por lo que aunque la esperanza matemática de todos ellos sea positiva si los mezclas puedes encontrarte con algo bien distinto. En el trading, si puede pasar algo negativo, muy posiblemente pasará. Acota todas las posibilidades posibles para que si tiene que pasar, no sea una catástrofe.
Este síntoma es característico del trader que empieza a buscar algo a lo que agarrarse y no acaba confiando demasiado en si mismo, ni en su método.
¿Antídoto?. Estudia, prueba, compara, dale la vuelta del revés, por arriba por abajo, además de las pruebas en el testeo en sí comprueba si el sistema/método funciona en real, déjalo correr, si ves que funciona prueba con poco capital y si después de todo esto sigue funcionando : utilízalo.
Si te saltas alguno de estos pasos es posible que cuando entres en draw te vengas abajo pensando que te iría mejor con otro método. Que con este no funcionas bien.
Si no aprendes a gatear bien con el método, ¿Cómo vamos a querer ponernos a correr en las olimpiadas?
Este es el primero de tres errores comunes que nuestra mentalidad de gato persigue pájaros nos llevará a hacer tonterías.
¿Alguna más que se te ocurra?
Buen trading.
