Menor crecimiento. Esto es lo que el FMI avisó recientemente hablando de los mercados emergentes, bajando su previsión de crecimiento para este año al 4.5%. Y ya van dos años consecutivos de desaceleración, lejos del crecimiento del 7%, normal a principios de siglo.
No obstante, la desaceleración mundial parece que lleva un mayor ritmo. Por lo que viendo el conjunto no podemos decir que estemos ante las peores noticias para los mercados emergentes.
Desde 1994 parece que los únicos periodos de tiempo en los que las monedas de los mercados emergentes han ganado terreno al dólar ha sido cuando las condiciones globales, tanto en mercados desarrollados como emergentes, han empeorado
Viendo tal y como está la situación, a día de hoy, podemos sacar varias conclusiones. Observando las divisas podríamos pensar que las monedas de los mercados emergentes están infravaloradas frente al dólar. Algo que vimos en el año 2002. Por otra parte, desde 1994 parece que los únicos periodos de tiempo en los que las monedas de los mercados emergentes han ganado terreno al dólar ha sido cuando las condiciones globales, tanto en mercados desarrollados como emergentes, han empeorado. Algo que sucede igual con el mercado de renta variable. Los mercados emergentes se han comportado mejor que los desarrollados cuando las condiciones han sido nefastas.
¿Podremos fiarnos de estas pautas “estacionales” o confía más de la que se habló el otro día? ¿ve motivos para salir de los mercados emergentes?