¿Compro o no compro? ¿compro o no compro? La eterna pregunta que como las hojas de una margarita podríamos estar desojando constantemente. De hecho podríamos estar el día entero mirando un gráfico encontrado justificaciones para una decisión o la contraria a cada tick que realiza el precio. Es por este motivo que todos los tipos de análisis habidos y por haber, conocidos o no, van detrás de la misma cuestión. Y es que la cuestión que toda la pila de información del análisis técnico, fundamental, de sentimiento y cualquier otro que exista o se invente en el futuro intentará responder es ¿la tendencia vigente continuará o se girará en contra? El eterno dilema. Obviamente como para todos los dilemas habrá tantas propuestas como proponedores, que además de ser una palabra bastante fea (y más si la repites varias veces rápidamente) se refiere al hecho de que cada trader puede tener una opción diferente para abordar esta cuestión.
Como bien sabemos según la teoría de Dow una tendencia se establece con la unión de picos y valles cada vez más altos. Esto es, para una tendencia alcista tendríamos que ver una sucesión de eses (“S”) ligeramente inclinadas a la derecha o ligeramente inclinadas a la izquierda en el caso de la tendencia bajista. Cuando vemos un movimiento así podemos esperar que la tendencia continue. Hasta ahí todo parece que va bien. Pero ¿cuándo podemos esperar un cambio de tendencia según la teoría de Dow? Hay dos opciones, aunque la mayoría de los analistos se decantan por una de ellas. Te doy a elegir.
La llamada mala oscilación es aquel movimiento que presenta, por ejemplo en una tendencia bajista, una ruptura del máximo anterior viniendo de un mínimo mayor que el previo. Mirando el gráfico que te adjunto podrás ver como el nivel de B1 viene después de que se rompa B habiéndose iniciado en C, esto es, un mínimo mayor que el anterior que es A. ¿todo correcto? Podremos ver formaciones de suelo como un cabe con hombros inverso o similares. No obstante, para gran parte de los analistas técnicos no se habrá producido un verdadero giro ya que faltaría el componente extra que sí tiene la otra opción que te presentaré ahora. Aún así, por ejemplo como defiende Martin J. Pring, si hay otros factores, técnicos dice él o incluso que no lo sean, si me permites el consejo, podríamos estar ante un giro de mercado interesante.
El otro movimiento que podríamos observar y que da una confirmación extra que la mala oscilación es, no podría tener otro nombre, la buena oscilación.
La buena oscilación no solo necesita ver una ruptura de un máximo anterior viniendo desde un mínimo mayor que el anterior. Sino que necesitará crear un pico y valle mayor que el anterior. Por ejemplo, B-C-D es el valle a superar, ¿cuándo se produce un valle mayor? No lo hace cuando rompe formando D sino cuando se completa el nivel de B2, en el valle formado por D-E-B2. De esta forma tendríamos dos mínimos y máximos más altos. Muchos analistas esperan a que se de esta señal para considerar el cambio de tendencia.
¿Cómo podemos aprovechar esto para hacer trading? Dirás, pues siguiendo la teoría de Dow y operando los giros de mercado según se desarrollen cualquiera de estos dos patrones de giro. Efectivamente esta puede ser una opción. No obstante, te propongo otra más exótica.
No es ningún secreto el hecho de observar como las mayorías de las rupturas que se producen contratendencia son, en la mayoría de las ocasiones, rupturas en falso.
Aprovechando la teoría de Dow si vemos que se empieza a producir, en especial la llamada mala oscilación (la cual no ha confirmado tan claramente una tendencia en contra de la establecida) podemos empezar a buscar un posible fallo del mercado.
Como vemos en la idea de trading, que os planteaba recientemente, el gráfico venía con una clara tendencia bajista. Después de dibujar una formación de escalera, en el rango lateral que se dio antes de la caída que lo llevó a mínimos, empezó a trazar la recuperación con una formación de mala oscilación (puedes ver el gráfico de este tipo de formación más arriba). Obviamente, al romperse el último máximo relevante aparentemente el mercado iniciará un tramo alcista, podrán pensar muchos. En este punto normalmente veremos como muchos participantes quieren entrar ya que según ellos habremos visto una confirmación del mercado. Una situación parecida se puede observar después de romper un nivel de soporte o resistencia, la participación en estos niveles crece ya que aparentemente estamos ante un desenlace del mercado, algo que no pasaba mientras, por ejemplo, el activo estaba atrapado en el rango.
¿Qué pasará si el giro acaba fallando? Todos aquellos que hayan confiado en ese movimiento querrán salir de la posición. Si has comprado querrás vender. Y aunque no existe un nivel perfecto a partir del cual podamos decir que el mercado querrá cerrar su posición, sí es cierto que los mínimos relevantes pueden darnos una idea. En estas zonas veremos normalmente órdenes tipo stop de venta o lanzarse órdenes a mercado (en cualquier caso una orden tipo stop se convierte en orden tipo mercado cuando es alcanzada). De esta forma se quita liquidez al mercado siendo “arrastrado” en la dirección en la que se ejecutan las órdenes. Si todos queremos vender en una zona, lo que está claro, es que el mercado tendrá que ir bajando posiciones para poder darnos contrapartida a todos.
¿Que suele pasar entonces? Normalmente el movimiento en sentido contrario es mucho más fuerte que si no se hubiera producido esta “trampa” del mercado. Ya que no solo estaremos viendo gente que se quiere sumar al movimiento bajista sino que estaremos presenciando como aquellos que habían confiado en un giro de mercado, comprando, están saliendo de las posiciones.
De esta forma, como ya sabemos, Dow no siempre tiene razón.