Esta última iniciativa de modificar la Constitución Española de 1978 y la contestación que a través de la red está teniendo, me lleva a pensar que con la técnica y capacidad de comunicación existentes hoy, podría ser factible que los ciudadanos pudiésemos participar votando en directo y tiempo real las iniciativas legislativas que por su importancia y transcendencia, requiriesen de un amplio y mayoritario apoyo social, como es el caso. No dejando toda la responsabilidad a los diputados elegidos.
No se trata de dejar sin efecto o diluir el mandato que los ciudadanos hacemos a nuestros representantes para cada período legislativo, no. La cuestión es que ante grandes asuntos, grandes soluciones. Hay que aprovechar los medios de los que hoy disponemos y darles la mayor utilidad posible.
De esta manera, nuestros representantes democráticamente elegidos en las urnas, deberían de hacer un esfuerzo mayor, si cabe, para conseguir la adhesión ciudadana a la propuesta en cuestión. Además se conseguiría romper la disciplina de partido que deja nuestra democracia tan descafeinada. Ya no dependería de que el partido vote en un sentido u otro, sino de que consiga el apoyo mayoritario de los ciudadanos, de uno u otro partido, en cuestiones de gran notoriedad e importancia. Por supuesto que habría que desarrollar un procedimiento que estableciese el cuando y el como, con las máximas garantías de participación y fiabilidad. Posible, sin duda alguna. Le podríamos llamar Democracia en Tiempo Real (DTR).
¿Se puede pensar en una cosa así o no?
¿En una democracia en tiempo real?
¿En el telediputado permanente universal electrónico?