Al currante tonto eso no le importa, solo le importa vender medio millon de barras al mes, para aparentar que es el campeón del panquemao ante la galería, pero eso que dices y yo no hubiera dicho mejor, por 100 euros al dia, vender cáncer y no ganar ni para pagar el papel de los tickets de la caja registradora.
Aquí siempre engorda el buey, y la legión de tontos le ayuda. Ya ni hablo de quien compre ese pan. Hay que quererse poco.
A mi me dijeron que había varias fábricas de muebles que vendian el serrin del corte de madera para esta gente. Mezclaban con restos de cemento y residuos de varias granjas junto a algo de harina podrida y amasaban, así salía el pan.