Por fin se han dado cuenta de la realidad y están estudiando como deshacerse de TSB aunque sea con cuantiosas pérdidas, ajustar la plantilla de Banco Sabadell y centrarse en su negocio en España, algo que era más que obvio desde el principio y que ha ocasionado fuertes pérdidas a los accionistas. En cualquier entidad coherente, este gravisimo error estratégico, costaría el puesto a sus máximos gestores ya que ha puesto en evidencia su falta de prudencia, de rigor y de visión pero parece ser que en este caso, lamentablemente no va ser así.
Dependerá del precio de oferta del comprador. Lo normal es que si el banco está en dificultades la oferta sea baja. Sin embargo siempre estará supeditado a la aprobación de los reguladores y las autoridades
Y además son tan arrogantes que mantienen el dividendo en contra de las recomendaciones de los reguladores y de lo que ha hecho la gran banca que mayoritariamente han suspendido el pago. Además están vendiendo los negocios rentables y eso es pan para hoy y hambre para mañana
En cualquier caso el gobierno y los reguladores siempre deben dar el visto bueno a cualquier movimiento de fusión o absorción que implique a entidades bancarias. El Sabadell cometió un grave error estratégico con la compra de TSB. Conozco bien el mercado británico de banca y es complicado además esta entidad tenía balance basado en hipotecas 94% y casi nula penetracion en el segmento de empresas. En mi opinión el Sabadell debía haberse centrado en el mercado doméstico, en los segmentos de pymes, exportadores y particulares de nivel medio y alto como han hecho otras entidades como Bankinter o la Caixa y no haberse metido en aventuras. Como mínimo se puede calificar a la dirección actual del Sabadell de imprudente
El problema del Sabadell es su equipo directivo. Error monumental en la compra de TSB ha drenado más de 3.000 mm de euros de recursos y peor gestión posterior. Tienen un desconocimiento total del mercado inglés. Para arreglarlo han vendido negocios rentables, pan para hoy y hambre para mañana. Plan estratégico poco claro y errático. La cotización de la acción refleja esta mala gestión.