Seguro que en tu vida has tratado con muchos más funcionarios, que simplemente han hecho su trabajo, pero esos no los cuentas.En contrapartida, yo también te podría contar de empresas que engañan a la gente (por orden de "industriosos" directivos), que te pegan la "clavada" aprovechando la debilidad o la necesidad de la gente, etc. Aquí nadie es un santo, ni los empleados públicos ni los privados.Echar la culpa a los demás es el deporte nacional. Cuando las cosas van mal, se busca un chivo expiatorio. Estoy aprendiendo mucho de todos vosotros, pero de verdad que estoy perplejo leyendo algunas cosas en un foro de inversión.