Excelente post. La verdad que a veces estas cosas cotidianas son las que más dejamos de lado.
Sólo añadiría un detallito en la recopilación: un testamento vital con el deseo acerca de la donación de órganos. Es cierto que luego prevalece el criterio de la familia, pero normalmente ayuda bastante ya que la gente suele respetar las últimas voluntades.