Borodin
06/02/13 14:07
Ha comentado en el artículo Cleptocorporatocracia.
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Bon día Amigatxo:
Qué podemos hacer Enric?
Pues muchas cosas, como dije el otro día yo lo estoy vendiendo todo y…a vivir.
Ya estoy cansado de pagar impuestos para que se los lleven o para que los administren como lo están haciendo.
Otra opción es seguir enviando los a la mierda, como llevo haciendo desde hace tiempo, pero no lo voy a hacer.
Ahora me voy a volver un “candido” como ellos quieren y como "estic content y charraor" voy a escribir lo que me sale por los coj...
Señor Político honrado:
¿dónde está?
¿quiere ser mi amigo?
Me dirijo a UD desde aquí porque no sé donde vive ni tengo un lugar mejor desde donde hacerlo, pero tengo esperanza que me lea, porque estoy seguro que a pesar de todo usted existe.
Mire Usted señor político honrado, a pesar de lo alejados del pueblo que viven, a pesar de las vilezas que nos están haciendo, a pesar de la mala fama que sus colegas tienen entre nosotros, creo sinceramente que usted se encuentra en algún lugar.
Estoy seguro que su motivación es el servicio a los ciudadanos y la justicia social y su mayor deseo, además como político honrado simplemente quiere ejercer por delegación la soberanía popular.
¿Verdad?
Porque usted es un adalid de la democracia que tanto les costó traer a muchos, como por ejemplo los antepasados de mi amigo Enric, que también escribe por aquí.
Mire, señor político honrado, con su permiso quiero decirle y si acaso pedirle algunas cosillas de poca monta con esperanza e ilusión, espero que no ilusa.
Yo sé que cuando uno está acomodado en la poltrona, es muy difícil hacer saltar su conciencia acomodaticia para defender la democracia y la decencia del político, pues han pervertido el oficio hasta desprenderlo de la dignidad sublime de tan bella profesión, que en un sistema democrático moderno le debería convertir en paladín de la justicia social y en el defensor a ultranza de los derechos de la ciudadanía
Pues bien, me gustaría, si no le es mucha molestia, que diera usted la cara, que se convirtiera en defensor de la honorabilidad de su clase política, que denunciara y recriminara los atropellos que se dan por parte de sus colegas como la corrupción, la insidia, la falsedad, etc, que luchara para apartar de la actividad política a las manzanas podridas que acabarán pudriendo todo el cesto. Si no lo han hecho ya.
Mire usted; nosotros, los ciudadanos normales y corrientes estamos desarmados y nuestro voto, que es el arma y el poder que le damos a usted para que nos represente, no vale nada si no es bien usado en defensa de quien lo emite, del pueblo soberano.
¿Tan difícil es entender esto?
Mire, a usted se le eligió para legislar y, a través de ello, conseguir que la justicia imperara.
También se le otorgó poder para gestionar la cosa pública.
Dedíquese a ello, por favor, dedíquense a reclamar que se cumplan las leyes, a que sean efectivas y no burladas por los espabilados de las altas esferas y sufridas por las clases trabajadoras.
Haga una ley justa, en beneficios de la comunidad en general y no de unos pocos.
Emplee el sentido común.
Permitame recordarle que muchas veces solamente necesitamos la lógica más simple para ver con claridad el eje principal de las cosas.
Es así.
No le de mas vueltas por favor.
Mire usted señor político honrado; el Estado está para servir al ciudadano, desde luego con la implicación de este, y todos sus miembros, en su desarrollo. Y Usted, como gestor del mismo es el responsable de que la ciudadanía se encuentre a gusto en ese marco.
Así de fácil oiga.
Y usted es el responsable de que ocurra esa simbiosis.
Pero cuando esto no ocurre, cuando algunos se quieren ir y renunciar a la españolidad, también son ustedes los responsables.
Son ustedes quienes han sembrando el desafecto.
Se han parado a pensar que esta especie de disociación entre la ciudadanía y sus representantes solo puede llevar al Kaos, al descontento y a la muerte paulatina del sistema democrático?
Créame, la mayoría de la ciudadanía está convencida de que su clase política está repleta de mediocridades apoltronadas y de espabilados que practican el nepotismo y el abuso de poder en beneficio propio, carentes de ideales y de compromiso social.
Y ustedes son los responsables que esto haya ocurrido.
Haga el favor, no le dé mas vueltas hombre.
Mire; me atrevo a solicitarle unas cosillas, que seguro muchos también querrán:
Dé la cara e identifíquese como político honrado. Porque usted existe… ¿verdad? Queremos verlo y conocerlo.
Denuncie y luche contra los corruptos, especialmente sin son de su propio partido.
Alíese con el pueblo pisoteado y maltratado.
Luche por limpiar la imagen del ejercicio político y de la democracia real.
Dé ejemplo de honradez, de sentido común, con su intachable proceder y su mente abierta.
Sea digno de nuestra confianza para poder creer en algo que sustente el sistema democrático y sentirnos representados.
No nos engañe con la retórica cínica que nos trata como a niños y díganos la verdad para que podamos entender sus actos y corresponsabilizarnos.
Deje la mediocridad y abrace el idealismo humanista que le haga un verdadero líder que aglutine los intereses de la ciudadanía.
Sea el verdadero adalid de la justicia y la democracia real.
No olvide nunca que siempre el Estado debe estar al servicio de la ciudadanía, y que el ser humano antes que el dinero.
Mire, seré un incauto cuando espero de usted tantas cosas que entiendo son su verdadera función... pero mi fe en la política merece ser rescatada, porque la política -señor político honrado- es necesaria e inevitable, y solo la buena política crea adeptos, ciudadanos ejemplares y solidarios, convencidos de que los problemas se resuelven entre todos, codo con codo, pero sólo cuando hay justicia y compromiso social.
Señor político honrado, si existe, SALGA DE SU ESCONDITE…