Buenas tardes,
No sé si el aplazamiento de la conversión es una buena noticia si al final acaba en una quita (pues contra eso difícilmente se podría alegar, entiendo yo). Pero bueno, al menos parece que hay motivos legales para combatir.
Como dije días atrás, en cuanto me comunicaron la noticia me puse manos a la obra porque me siento totalmente indefenso. Así que pasé por tres fases:
1. Adicae (asociación de defensa de usuarios): Me dijeron que ellos lo hacían todo por la vía administrativa/burocrática, primero contactan con el banco, después con atención al cliente y finalmente con la CNMV. Si la respuesta no convence, entonces ya hay que buscarse la vida con abogados.
2. Apdef (asociación de bufetes de abogados especializados en productos bancarios): Me dijeron que seguro que tiraría adelante, que era muy viable que se ganase la batalla... pero no me gustó nada su atención, pues yo quería básicamente información para luego poder llevársela a mi abogado y lo dejaban todo muy en el aire. Hay en muchas ciudades, en la de BCN por lo menos deja mucho que desear.
3. Abogado privado (de momento no digo nombre, si alguno lo quiere que me lo pida por privado): No es especialista en estos temas, pero sí ha llevado casos de convertibles del Santander o el Popular. En su opinión, la argumentación básica debería ir encaminada hacia la emisión del producto, la idoneidad del inversor, la falta de información de las consecuencias a la hora de vendernos el producto...
Así que, en caso de finalmente poder llevarlo adelante, tiraremos por aquí. Aunque para mí el problema fundamental (aunque el abogado cree que la fundamentación de la demanda debe ir más hacia la emisión y comercialización del bono) es que FCC acuerda la conversión a finales de junio, pero la comunicación pública la realiza el 25 de agosto (pleno agosto, aunque yo no estaba de vacaciones) para comunicarlo antes del 29 de agosto. Yo, que trabajaba con Catalunya Caixa y pagaba una custodia de valores, no recibo comunicación ninguna, y estoy seguro que porque los señoritos estaban de vacaciones... y los que quedaban estaban muy pendientes de salvar su culo con la integración de BBVA que se culminaba dos semanas después(9 de septiembre).
En fin, la verdad es que si alguien me comprase el bono por un 80% de su valor inicial, que di la orden el mismo día que me enteraba, me daría con un canto en los dientes por solo perder 10.000 euros. Porque la conversión obligatoria supone perder unos 32.000/35.000 euros, pero a ello hay que añadir el coste del abogado y, en caso de derrota, unas costas que pueden alcanzar los 8.000 euros aprox., o sea que prácticamente puedes perder la inversión íntegra.
En fin, a seguir rezando.
