Re: Me voy a Lisboa
mmmm, qué ricooooo.
Heidi era mi ídolo de la infancia. Buena, cariñosa con los mayores, atenta con los enfermos, espabilada como ninguna. No como los dibujos animados de ahora, que mira que son tontos el Bob esponja y cía, el pocoyó o muchotú y los maléficos muñecacos japoneses que son violentos y hasta obscenos.
Hoy no echo la siesta. Ciao!
Si un amigo es de verdad, su amistad perdura en el tiempo y con la distancia.