¿¿Cuatro minutos con la piel hacia arriba?? Buf, ésto huele a técnica de Arguiñano pero de lejos, paisano... Hombreee, que un "giputxi" no nos va a enseñar a los de Bilbao a hacer el bacalao.
Ay, ay, ay, ay... Serás bilbaíno, pero cocinero me da a mí que no, ¿eh? ;-)
De todas formas, hoy en día y sobre todo en restaurantes que van con prisa, es muy frecuente equivocar bacalao "ligado" con bacalao "al pil pil".
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RECETA:
Bacalao al pil pil al "Aitxitxe" de Karlicones, ;-)
Compramos pieles de bacalao, solo las pieles, si provienen de piezas sin desalar las desalaremos previamente y si ya están desaladas, pues nada, al agua patos...
Las ponemos a cocer en agua, que cuezan bien, durante el proceso de cocción se irá extrayendo la gelatina existente y tendremos un fumet, reduciremos el agua puesta al principio a más o menos de la mitad.
Ahora viene el hacer un pil pil como el Aitá manda, ;-).
En una cazuela de barro con aceite de oliva virgen extra español, confitamos unos ajos y unos aros de guindilla para que el aceite tome el aroma de estos ingredientes.
Sin que lleguen a quemarse los ajos ni los aros de las guindilla, los sacamos del aceite y los reservamos.
En este aceite aromatizado añadimos el bacalao: Ponle mejor esos casi 5 minutos iniciales con la piel hacia abajo, y una vez transcurrido ese tiempo, retiramos también el bacalao y lo reservamos. Dejamos enfriar el aceite a unos 60º C.
Hay termómetros a distancia excepcionales, ideales para este preparado.
Bien, ponemos un par de cucharones del fumet en otra cazuela de barro -más bonita- y le vamos añadiendo el aceite de oliva virgen extra como si intentásemos hacer una mayonesa, batiendo con un batidor de metal no inoxidable y en unos pocos minutos, -la ultima vez que la he hecho en 3 y medio- estará lista para emplearla con el bacalao.
Añadimos a la salsa otra vez el bacalao con las pieles también hacia abajo, tranquilo, que el resto del bacalao ya irá cogiendo calor con el contacto con el pil pil caliente y se irá haciendo solito..., agarrando la cazuela de barro y moviéndola de acá para allá con el característico y sensual movimiento de vaivén del pilpil de mediados del siglo XIX.
Un par de minutos de placer, en los cuáles la salsita acariciará con mimo al bacalao por laterales y parte superior... y ya estará listo para servir en las cazuelitas de ración...
Hay quien lo adorna con los ajitos y los aritos de guindilla, pero No calentemos al fuego otra vez los mismos, simplemente depositarlos en la salsa, ya tomarán calorcito, porque como se quemen cualquiera de los dos, la habremos pifiado, pero bien.
(En mi cazuelita individual no pongo guindillas por lo que he explicado varias veces ya en este mismo hilo...)
On egin mutiltxo! ;-)
Ya me contarás qué tal, si lo haces así. Reclamaciones al SAC, ;-)
Un saludo cordial ¡y feliz domingo!
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N.B.:
Supongo que lo habrás oído pero como por Lisboa entran muchos no paisanos, va por ellos ;-)
¿Leyenda o historia?
""El Sitio de Bilbao y el bacalao al pil-pil
Os preguntaréis ¿y qué tiene que ver el Sitio de Bilbao con un plato tan típico y sabroso como es el bacalao al pil pil?
Cuentan que su origen tuvo lugar durante el segundo asedio a Bilbao por las tropas carlistas.
Según la leyenda, un comerciante solicitó 20 o 22 bacaladas, antes de que comenzara el asedio y por un error le enviaron 20.022.
El comerciante trató de vender parte del exceso de bacalao que por error había recibido, al resto de poblaciones del litoral cantábrico, pero en éstas que comenzó el segundo asedio carlista a Bilbao. Por fortuna y dada la escasez de alimentos que sufrió la población, los excedentes de bacalao y de la previsión de aceite que por suerte también tenían, ayudaron a paliar la situación de hambruna que padecian los bilbaínos como consecuencia del asedio.
Estas circunstancias convirtieron a aquel comerciante en un hombre rico, llegando a ser uno de los más importantes empresarios bilbaínos del siglo XIX.
Gracias a aquella remesa extra, a una buena provisión de aceite y al buen hacer de los bilbaínos, el bacalao al pil-pil se convirtió en uno de los platos más típicos de la gastronomía bilbaína y por ende, vasca.""