Por Paola Pecora
Luego de las inversiones tradicionales en energía, agricultura y minería, hoy China invierte fuerte en un nuevo y pujante sector en Brasil.
Se espera que la inversión china en Brasil alcance los US$9.000 millones este año, con US$ 4.500 millones yendo a nuevos sectores. El gigante chino busca diversificarse y poner un pie en cada continente desarrollando inversiones que le abrirán el futuro que China espera: ser una primer potencia económica dentro de unos 10 años. Tal vez menos.
Brasil representa hoy el 40% de la economía de Latinoamérica, y según Alessandro Texeira, ViceMinistro de Desarrollo, Industria y Comercio Exterior de Brasil, representará el 50% en los próximos 10 años. Dos gigantes que buscan unirse como socios estratégicos y potenciar sus inversiones.
Desde la caída en la actividad económica internacional luego del estallido de la burbuja inmobiliaria en Estados Unidos y Europa y posterior crisis financiera, que China ha intensificado sus compras de activos e inversiones en compañías en el exterior de su territorio, aprovechando los bajos precios de los activos de compañías que se reestructuraban minimizando gastos y aventando una menor demanda con precios en franco declive en los mercados bursátiles. El momento ideal para comprar, en momentos de crisis. Y tanto China como Brasil son países que elaboran estrategias a futuro, apuntando a lo que serán las necesidades mundiales primordiales: alimentación, energía, tecnología, comunicaciones.
¿Cómo podemos adelantarnos a esta nueva tendencia y participar de sus beneficios?