- Mejoramos el sistema simple de inversión en el MSCI World en un 6% desde 2005.
- La mejora de rentabilidad va acompañada de una gestión psicológica mucho más asequible para los inversores novatos.
En Rankia podréis encontrar miles de posts y artículos sobre como invertir, pero la realidad es que no podemos leerlo todo, ni aprenderlo y mucho menos dominarlo. El tiempo es oro y tenemos poco… Así que, si no eres un inversor profesional, este artículo pretende darte la clave para ganar invirtiendo sin quitarte el sueño por las noches y evitando que dediques tu tiempo a aquello que más te guste.
En el anterior artículo ya hablamos sobre un sistema simple de inversión que básicamente te diversifica entre casi 3.000 compañías y en decenas de países. Su rentabilidad histórica está por encima del 5% y no requiere rebalanceos ni pagar elevadas comisiones, así que desde mi punto de vista es el punto de inicio y la piedra angular de cualquier inversor a largo plazo.
Ver las caídas como una oportunidad y no como un riesgo
Una forma simple de generar más rentabilidad en casi cualquier sistema de inversión pasiva, es decir, de replicar un índice y esperar es el de guardar capital para cuando el mercado caiga.
En este ejemplo, supongamos que vas a invertir 200€ cada mes en el MSCI World. De haberlo hecho desde 2005 y tras superar la crisis global de 2019 (donde el MSCI World cayó un 60%) el retorno de la inversión ronda el 55%. Esto no esta nada mal teniendo en cuenta que has ido invirtiendo un poquito cada mes y por lo tanto al inicio del todo (2005) cuando el mercado era mucho más barato tu capital era muuuuy pequeño.
Como ves, esta forma de invertir es tremendamente simple y efectiva. Cuidado, ha tenido caídas del 60% y por lo tanto debes ser consciente de que a largo plazo estas cosas pasan y muy probablemente, al ser un índice global, se recuperen. Pero nadie te lo podrá garantizar nunca.
Para aprovecharnos de estos malos momentos de indecisión global yo propongo un método simple. En vez de invertir 200€ cada mes, inviertes 100€ y el resto lo guardas. Cuando el mercado caiga un 10% inviertes un 50% de tu capital reservado. Si cae hasta el 20%, otro 50% de lo que te quede y si cae al -30% entonces invierte TODO lo que quede en la cuenta de reserva.
Para haceros una idea, os dejo un gráfico de en que momentos (en naranja) invertiríamos el capital reservado. Como veis nos aprovechamos de todas las caídas importantes y reservamos dinero en las subidas.
Usando este método desde 2005 la rentabilidad del 55% incrementa hasta el 61% y hace que en periodos como el de la crisis de 2009 tus drawdowns sean menores ya que estás aprovechando las caídas para ir de rebajas.
Los efectos psicológicos
Cuando usas este sistema, es más fácil soportar los momentos difíciles del mercado, ya que terminas viéndolos como auténticas oportundiades. En primer lugar porque en momentos como el actual, con los mercados muy altos, conservas capital para prevenir posible caídas. Cuando las haya, podrás aprovechar para entrar fuerte al mercado.
Alerta ¡Sistema limitado!
Cuidado, este sistema asume que el mercado tarde o temprano volverá a subir y esto NO es aplicable para índices de países y mucho menos para empresas. Solo tiene sentido en una cartera diversificada global, donde se hace difícil pensar que a nivel mundial podamos ir hacia atrás de una forma permanente.
Y en conclusión…
Un sistema tan simple como el de ir comprando cada mes el índice MSCI World reporta un beneficio excelente incluso superando crisis globales como la de 2009 (-60%) y viéndose poco afectado (-10%) en otras crisis más localizadas.
Desde 2005 el MSCI World ha retornado un 117% aunque al invertir poco a poco el sistema nos deja con un 55% de retorno o incluso más si lo optimizamos para aprovecharnos de las caídas del índice.
Recuerda que este sistema está pensado para alguien que no está interesado en bolsa pero quiere sacar provecho de las rentabilidades que ofrece arriesgando lo mínimo. Si buscas mayores rentabilidades claramente tendrás que ir a inversiones más alternativas.
Feliz trading!
