Con el comienzo de la crisis en el 2008 y cuando se vislumbraba lo que se nos echaba encima, los políticos no tardaron en acusar de la situación a los “especuladores” en los mercados financieros. Qué bueno que los “especuladores” no tienen ni nombre ni cara concretos!
Es difícil de separar las figuras del especulador y del inversor. ¿Qué fina línea delimita esa separación?. Los llamados “especuladores” en los mercados financieros siempre han sido necesarios para el buen funcionamiento de los mercados y dar liquidez a los mercados.
Con la nueva Tasa Tobin los políticos vuelven a evidenciar una vez más su incapacidad para solucionar problemas, su desconocimiento de los mercados ( o a lo mejor excesivo) y la facilidad para tirar balones fuera, que tienen. Se eximen frente a la opinión pública de la culpa de su mala gestión, al tiempo que incrementan su recaudación vía una nueva tasa que cuando ha sido aplicada, ha dado muestras de su inutilidad y de los perjuicios que puede ocasionar tanto en el sistema financiero como en la economía local. Porque, no lo dudemos, esta tasa sobre, teóricamente, el sector financiero, será repercutida sobre el inversor retail, de una u otra manera. ¿No nos tocó pagar el rescate y sus agujeros hace un tiempo?
Eso sí, ahora demonizan a países como Reino Unido que, lógicamente, prefieren mantenerse al margen de todo este circo y, por supuesto, sacar tajada de la incompetencia de los políticos que les rodean. Estos sí lo tienen claro.
Así que, en fin, dentro de seis meses tendremos la nueva tasa Tobin aplicada en nuestro país y en 10 más, y todo el que tenga oportunidad tendrá que buscar alternativas, que casi todas pasan por salir fuera de estas fronteras. Y los pequeños inversores de clase media… a seguir remando!
