JOSÉ MOURINHO
27-05-10
Desde que murió nuestro padre (ay polvo, más polvo enamorado. Como te quiero y te echo de menos todavía y para siempre, Papá), nos desafectamos de dos actividades gregarias y en principio masculinas: el fútbol y la caza menor.
Siempre cazamos con nuestro padre, un rito salvaje y primitivo que nos entronca con las cavernas: cuando éramos unos homínidos peludos y con las pelotas al aire y no había un Mercadona cerca. Nuestro amor por los animales, sobre todo por los perros, era compatible con la actividad de asesinarlos (siempre deportivamente, y dejando una posibilidad de fuga a la pieza): nos consolábamos pensando que éramos unos cazadores primigenios, y que teníamos que alimentar al resto de la tribu.
Ver un partido del Real Madrid con nuestro padre también era un rito. Nosotros lo veíamos más por estar con él que por el partido. Noventa minutos de nuestra vida dedicados a ver lo que hacen otros nos parecen excesivos. Pero, ay, nuestro padre disfrutaba tanto, que le acompañábamos: una cerveza, o un güisqui y algo de picar, y nuestro padre era el más feliz hombre del mundo.
Ayer leímos una columna del inconmensurable Arcadi Espada, para nosotros uno de los mejores columnistas junto con Carmen Rigalt y David Gistau. Y resulta que hablaba de José Mourinho.
Como madridista tibio que nos consideramos (queremos que también gane el Atlético de Madrid, e incluso el Barsa, en dependiendo de contra quién juega: el año pasado queríamos que ganara la Champions, porque Sir Alex Ferguson es un gilipollas, y encima tiene la cara enrojecida típica del borrachín inglés, y aunque no beba. En cambio, este año queríamos que ganara el Inter, debido a José Mourinho).
Nos vamos a volver a aficionar al fútbol gracias a José Mourinho (JM).
JM es un depredador, un híper macho alfa de la manada que suelta hostias a diestro y siniestro. Y encima es religioso, y reza y da las gracias al Demiurgo por sus victorias. Esto nos tiene desconcertados, la verdad.
Florentino Pérez, ese gran hombre incomprendido (la semana que murió nuestro padre, el hermano de Florentino estaba ingresado en el mismo hospital que nuestro padre. Durante esa siniestra semana, vimos a Florentino de nueve de la mañana a nueve de la noche, sin salir del hospital, y tan sólo para comer el modesto menú de la cafetería. Un hombre que acompaña a su hermano en su agónica agonía de un terrible y doloroso cáncer, merece nuestro cariño y admiración) ha dado en el clavo. Ha contratado a un entrenador que está a su altura y la altura del Real Madrid. No será peregrino que el Real Madrid enlace seguidas varias ligas y Champions. Al tiempo.
Hasta la catalana Pilar Rahola ha dicho que se tiraría antes a JM que a Guardiola, ya que el gran caballero catalán le parece demasiado naif al lado de la bestia parda que es JM. No es broma. Lo hemos leído en la prensa.
Y resulta que en una encuesta, las italianas (que están siempre sobradas de los guapos italianos) han dicho que su amante ideal sería JM. Vamos, que JM les pone cachondas.
JM es el macho por excelencia. Es el carácter, el dominio y la arrogancia. No sólo con una mirada pondrá firmes al vestuario del Real Madrid: es que pondrá firmes al mismo Florentino.
JM o cómo ser arrogante y chulo cuando uno lo puede ser y lo merece ser.
La próxima temporada, el fútbol va a estar divertido. Por eso los del Barsa están tan acojonados. Ay, como dijo alguien del fútbol: la risa va por barrios.
JM o el hombre de siempre sin complejos: no sólo es el líder indiscutible de la manada: él solo es una manada entera.
Cómo nos vamos a reír la próxima temporada. Hasta volveremos a ver el fútbol, y luego se lo contaremos a nuestro padre. Una vez más, nuestro padre sonreirá.