Al margen de unas pocas excepciones, la economía de EEUU continua mostrando síntomas sorprendentes de fortaleza y resistencia. Por ejemplo el Mercado laboral, las solicitudes de desempleo cayeron otros 19k la semana pasada hasta 366k, las menores desde mitad de 2008. No es solamente que menos gente esté perdiendo su empleo sino que más gente está encontrando trabajo también. El sector manufacturero parece que se expande gradualmente, como confirma el Empire Manufacturing Index de Diciembre. El índice FedEx, considerado un indicador de tendencia de la economía americana, presentó Fuertes resultados debido a un aumento considerable de las compras online. Por su parte la Fed aumentó sus previsiones de crecimiento para el año próximo en su reunión de martes.
Teniendo en cuenta el contexto mundial cada vez más problemático, especialmente en Europa, queda por ver cuánto tiempo esta racha de buenas noticias continua. Las exportaciones representan poco más del 13% de la economía por lo que habrá que centrarse en aquello de lo que se alimenta su PIB que es el consumo interno. Los consumidores han estado gastando más en la segunda mitad de este año, con agresivos descuentos como señuelo para conseguir que abran sus carteras y reactiven el país. A pesar de los signos de mejora en el frente de trabajo, todavía hay una enorme masa de largo plazo de trabajadores desempleados y desalentados. Además, la Fed aún espera que la economía no crezca lo suficientemente rápido en el próximo período para poder satisfacer lo prometido en su mandato respecto del empleo y, en consecuencia, se sigue manteniendo una postura política muy expansiva. Además el QE de la Fed sigue siendo para el año que viene plausible, a pesar de estos desarrollos económicos más favorables en las últimas semanas.