El SNB ha mantenido el suelo para el EUR/CHF en 1.20, pero sus previsiones sugieren que la batalla para evitar la deflación requiere más trabajo en el campo de las divisas. Para el año que viene, el SNB espera que la economía crezca un mero 0.5% y espera una inflación de -0.3%, aumentando hasta 0.4% para 2013. El SNB basa sus previsiones en un mantenimiento de los tipos en cero y una depreciación del CHF. La cuestión natural que surge es cuál es la probabilidad de que esa última premisas se cumpla y si dicho cumplimiento vendría de los movimientos del mercado o si requeriría una intervención del SNB. Dado el tortuoso entorno global actual se antoja más probable esta última opción. El SNB fue claro en su postura en Septiembre indicando que el nivel de 1.20 estaba sobrevalorado.