No es posible conseguir la consistencia en el trading si uno se centra en los resultados.
Un esfuerzo enorme que se exige a quienes quieran sobrevivir en este negocio, es la necesidad de cambiar desde dentro hacia afuera. Es el único modo de que los cambios de actitud que exige ser trader ganador, se produzcan de una forma natural y perdurable. Es vital entender, aceptar y poner en práctica esto, en caso contrario, es una tortura el camino para lograr la consistencia.
El hecho es el siguiente: La inmensa mayoría de los traders que se esfuerzan por lograr la consistencia en su trading, se enfocan en el resultado de sus operaciones. Y acorde a ello, se sienten mejor o peor con su rendimiento como traders. Puede que parezca obvio que esa es la forma lógica de medir nuestro rendimiento como traders. Pero en el fondo, eso es puro veneno para nuestras carreras.
Un trader, sea ya un profesional, o sea un recién llegado que está luchando por adquirir conocimientos y experiencia, debe medirse por su capacidad en seleccionar sólo negociaciones que cumplan los requisitos que su plan de trading indica. Y debe medir que tal está haciendo su trabajo, en relación a la capacitación que esté demostrando tener a la hora de seleccionar las jugadas. La calidad de dichas jugadas, debe medirse acorde a las características técnicas que cumplían a la hora de abrir la negociación, en relación a las reglas que su plan de trading detalla que deben cumplir las negociaciones a acometer. Importando absolutamente nada, el resultado final de las negociaciones en la medición del rendimiento como trader.
Nótese la sutil diferencia, el trader debe esforzarse en medirse en relación a cuán capaz fue de seleccionar sólo negociaciones que cumplían con las reglas de su plan, y no, en cuál fue su capacidad de escoger negociaciones ganadoras. Esto es vital. Créeme que el dinero en el trading no es el objetivo, sino la consecuencia de hacer bien tu trabajo. Si te enfocas en hacer dinero, es cómo el doctor que no se centra en el problema del paciente, sino en cuanto le está reportando económicamente este paciente, o el electricista que no se enfoca en resolver la avería, sino en cuanta pasta le va a dejar este cliente, o el fontanero, o el abogado, o el panadero, o el camarero.... Nadie se centra en el dinero cuando trabaja, uno se centra en hacer su trabajo y el dinero llega como consecuencia de hacer bien su trabajo. ¿Por qué hacer lo contrario en el trading? Probablemente debido a que la mercancía de cambio en este negocio es esa, el dinero.
Es imprescindible creer en esto, inculcarlo en el interior de uno mismo, y apoyarse en este razonamiento cada vez echemos la vista atrás en nuestras operaciones.
Cada noche, cada fin de semana, o cuando sea que uno repasa qué es lo que ha negociado, uno debe sentirse bien o mal, en relación a cuán capaz fue de ejecutar negociaciones válidas según el plan. Y medirse exclusivamente por ello, lo cual además es liberalizador, ¿sabes por qué?, porque ceñirse al plan depende de ti. De tu actitud. Tú puedes controlar eso. Pero que una operación salga bien o mal NO depende de ti. Por lo que si te mides por el resultado de tus operaciones, te estás exigiendo medirte por algo que no depende de ti. Porque te estas exigiendo medirte por tu capacidad para predecir el futuro. Y en ese caso, ningún ser humano tiene las de ganar. No hay manera de ser consistente acertando qué va a pasar en el futuro. Y eso es exactamente por lo que uno se mide, si centra su valía como trader en relación a cuales fueron los resultados de sus negociaciones.
No significa que uno debe ser conformista con lo que le suceda, todo lo contrario, significa que uno debe medirse por lo que uno puede controlar, lo cual conlleva automáticamente que uno acepta la responsabilidad de su trading, porque uno SÍ es responsable de sus acciones, uno es el responsable de aplicar las reglas de la estrategia, esté cómo esté física y emocionalmente ese día. Uno es dueño de sus decisiones y de sus acciones, y debe saber que posteriormente, va a medir su valía cómo trader acorde a cómo respetó sus reglas en las negociaciones. No según el resultado final de las mismas. Ante lo primero no hay excusas para eludir la responsabilidad de porqué entramos en un mal setup, ante lo segundo, es facilísimo encontrar excusas para eludir la responsabilidad de porqué salió mal el trade (mal dato de paro, guerra, volatilidad extrema, mercado caótico, Trump en la tele, etc, etc).
Hay una razón más por la que medirse acorde a nuestra capacidad de seleccionar jugadas, en lugar de medirnos por el resultado de las mismas. Y es por la ley de los grandes números. Una estrategia ganadora, sólo es ganadora dado un cierto número de negociaciones.
Digamos que tenemos una estrategia que nos produce una media de un 70% de jugadas buenas, frente a un 30% de jugadas malas. La única forma de que esos números sean estables, es haciendo el suficiente número de jugadas y hacerlas todas iguales, cumpliendo siempre los mismos requisitos para entrar y salir, si uno cambia una sola cosa en una entrada, ya está aplicando otra estrategia.
Siguiendo con este mismo ejemplo, si uno dispone de ese 70% de aciertos, significa que de cada 10 operaciones, 7 serán buenas y 3 malas, pero uno no tiene la capacidad de saber qué tres van a ser las malas. Uno debe actuar siempre igual, guiarse por las reglas del plan, y si se cumplen, acometer la jugada. Porque es imposible saber si esta es una de esas jugadas que pertenece al 70% ganador, o al 30% perdedor. Intentar predecir eso con antelación al resultado final de la negociación, es jugar a ser adivino.
Los comienzos son difíciles, porque uno no tiene ninguna de las dos cosas. No dispone de esta información, y por lo tanto de la actitud que le lleve a guiarse por su capacidad de seleccionar jugadas y no por el resultado de las mismas. Y porque aunque acceda a esta información, no dispone de estrategia fiable alguna que le convenza que debe ceñirse a ella y medirse acorde a su capacidad para respetar sus reglas. Es como la pescadilla que se muerde la cola. No sabe si falla su capacidad de elegir buenas jugadas, o es que la estrategia no tiene un ratio aceptable de jugadas ganadoras.
Elige aquella estrategia de trading que más confianza te dé, y cásate con ella. Obsesiónate con serle fiel, y mídete por ello, no por los resultados de los últimos trades. Esa es la forma que el mercado tiene de sacarte del buen camino. Haciéndote probar muchas cosas. Al mercado solo puedes sacarle dinero si consistentemente haces algo que funcione a la larga, si te desmoralizas por tus últimos resultados y comienzas a cambiar cosas, nunca cumplirás con la ley de los grandes números, y estarás dando vueltas de una estrategia a otra, hasta que seas un número más en la estadística de los traders que nunca lo lograron.
Un cordial saludo.
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Fernando Piñero
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