Blog Diez mil horas de Trading

A menudo, en la vida y en el trading, tendemos a caer en la fácil tentación de construir o "ponernos muros" (de pensamiento ó de actuación), frente a nosotros mismos y frente a los demás, en lugar de intentar "construir y levantar puentes", que nos permitieran escuchar con más atención lo que piensan, dicen y hacen los demás

A menudo, en la vida y en el trading, tendemos a dar por ciertos algunos axiomas o aforismos que hemos venido oyendo o leyendo desde siempre, y ni siquiera nos tomamos la molestia de ir contra ellos, o de ponerlos en entredicho, porque aparentemente nos da más fiabilidad confiar en su certezas

A menudo, en la vida y en el trading, tendemos a dejarnos vencer por la tentación de ver continuamente el vaso medio vacío, en lugar de medio lleno...de ver siempre lo malo, dentro de las posibles cosas buenas, de fijarnos más en los defectos de las cosas (en un pequeño punto negro que esté en la esquina de un enorme folio inmaculado...en lugar de disfrutar del resto del espacio, blanco, impoluto

A menudo, en la vida y en el trading, nos resistimos a ponernos normas, reglas, disciplina... a organizarnos y tener de antemano trazado un horario, un plan ó una hoja de ruta, porque pensamos que si improvisamos y decidimos las cosas (y las operaciones que metamos en el mercado) sobre la marcha

A menudo, en la vida y en el trading, no nos damos cuenta de cómo importa tanto la ACTITUD (el espíritu, las ganas, el compromiso, la motivación, el esfuerzo, la disciplina...), como la APTITUD (el trabajar, el aprender, el formarse, el estudiar, el practicar, el llevarlo a la realidad día a día, sesión a sesión, y cómo, por muy tópico que pueda sonar